Un Audi Q8 fue uno de los coches rayados por el menor de tres años. | Wikimedia

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Llevar a los niños a un concesionario puede salir muy caro y así pueden ponerlo de manifiesto los padres de un pequeño de tres años en China. En concreto, acudieron con un amigo a un concesionario de Audi y el niño se entretuvo dibujando con una piedra una decena de vehículos.

El dueño del concesionario denunció a la familia y reclamó 200.000 RMB (Yuan chino), unos 25.619 euros. Esta cantidad era la estimación inicial del daño causado por el pequeño. El concesionario argumentó que tenía que repintar los vehículos, por lo que ya no podrían venderlos como nuevos, según ha informado 7news.

Finalmente, ambas partes llegaron a un acuerdo y el padre del menor tendrá que abonar al concesionario 70.000 RMB, casi 9.000 euros. Por tanto, la excursión al concesionario le ha salido muy cara a esta familia china.