Los participantes de la Ruta de los 5 Monasterios a la salida en Son Moix. | Gabriel Alomar

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Con una mayor asistencia sobre los previsto, la Ruta de los 5 Monasterios reunió este domingo a numerosos participantes en su XIII edición de este circuito emblemático en el calendario del cicloturismo. En el MallorCafe de Son Moix se dieron cita por la mañana los amantes de las dos ruedas para este tradicional encuentro no competitivo de 212 kilómetros de recorrido.

«Cuando empezamos había ocho grupos y ahora son más de treinta, pero más pequeños. Aunque este año esperamos menos participación, ya que la jornada coincide con otros eventos. En todo caso quiero agradecer a los patrocinadores y colaboradores que han ayudado para redactar la hoja de ruta y el letrero publicitario, sin cuya aportación no sería posible su realización», indicó Miguel Pascual ‘Cardi’, presidente de la Asociación Amigos de las Motos.

MOTOTURISMO RUTA 5 MONASTERIOS.

Aficionado de toda la vida, indica que ha tenido 22 motos y ahora participa con un modelo de 1.200 cc que en seis años ha recorrido 150.000 kilómetros. En el punto de encuentro los participantes aprovecharon para desayunar e intercambiar impresiones y allí encontramos veteranos de la ruta que han tomado parte en todas las ediciones, y otros noveles, pero todos con gran ilusión a la hora de compartir este recorrido.

Los monasterios incluidos en el circuito fueron los de Lluc, donde el padre prior bendijo las motos, tras recorrer Sóller y la carretera del Puig Major, el de Santa Magdalena, donde tomaron unos refrescos antes de comer en Manacor, el de Sant Salvador en Felanitx, Montesión en Porreres y el monasterio de Cura, en Algaida.

En la concentración participaron motos de todo tipo y cilindrada, destacando algunos ejemplares como una impresionante Harley customizada con un acabado artesano y el dibujo de una pin up. «Este trabajo me lo han hecho en Badajoz, ya que aquí no he encontrado a nadie que lo hiciera, aunque el dibujo sí está realizado en Mallorca», asegura Enrique, en compañía de Anja.

Entre los modelos participantes más veteranos vimos una Honda Shadow del 92 también customizada y de un llamativo color rojo, propiedad de Gonzalo, uno de los veteranos de este encuentro que reúne a moteros que también se apuntan a otros eventos de las dos ruedas de los que se celebran en la Isla. Es el caso de Mario y Rosa que destacaron el buen ambiente de la jornada.