Imagen de archivo de Michael Douglas en s'Estaca. | Archivo

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Michael Douglas continúa buscando un comprador para s'Estaca, su finca de más de mil metros cuadrados situada en Valldemossa. La última estrategia del actor ha sido publicar un vídeo en el que muestra las estancias del inmueble.

Actualmente la agencia Engel&Völkers gestiona la venta en un régimen de exclusividad, según su página web. El actor norteamericano y su ex-esposa pusieron s'Estaca a la venta en 2014, pidiendo entonces 55 millones de euros. Posteriormente el precio establecido fue de 48 millones, pero no se consiguieron resultados, por lo que el pasado verano se redujo a 36’5. En la actualidad el precio es de 28'9 millones.

En el vídeo Douglas explica que se trata de un «lugar de retiro mágico», por su relación con el Arxiduc Lluís Salvador. «Cuando vi por primera vez s'Estaca, caí también bajo su hechizo. Muchos de mis amigos han estado en s'Estaca y han disfrutado de una estancia maravillosa», detalla.

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En el audiovisual el intérprete recorre la finca y describe las estancias a los posible compradores. La finca cuenta con diez dormitorios, diez baños y «puede acomodar fácilmente a 20 personas». El actor señala que «ahora mi vida ha cambiado y es tiempo de dejar que otras personas disfruten el privilegio y la aventura de vivir en s'Estaca».

Engel&Völkers detalla que la construcción «se alza sobre el mar en la costa norte de Mallorca cerca de Deià y Valldemossa. Su excelente ubicación en la Serra de Tramuntana ofrece impresionantes vistas al mar y se encuentra a solo 30 minutos en coche de Palma. S'Estaca comprende siete edificios separados, cada uno con su encanto único. La casa principal fue comprada por el archiduque Luis Salvador de Habsburgo en 1867, quien la convirtió al estilo arquitectónico eólico». La propiedad incluye «una biblioteca, un salón multimedia, una bodega, un pabellón morisco, terrazas para comer, un gimnasio, un spa y una piscina de mármol, entre otras estancias».

S'Estaca, además, ha sido escogida este 2019 como uno de los escenarios para la nueva serie de Netflix: White Lines. Se trata de un drama criminal de Álex Pina, creador del fenómeno La casa de papel. Será a principios de junio cuando el equipo de producción arranque su rodaje y la primera localización será la propiedad de Michael Douglas. La grabación se producirá en dos de las casas que componen la finca, así como en la gran piscina que las custodia, además de en sus alrededores; una localización de lujo para el equipo de White Lines, cuyo estreno en la famosa plataforma está previsto para 2020.