El ‘Kibo’, de 82 metros, pertenece al baquero ruso Alexader Mamut.

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La costa de Calvià, por su proyección turística, es uno de los lugares elegidos para el fondeo por parte de los superyates que todos los veranos surcan el litoral de Mallorca.

Este viernes coincidieron entre la bahía de Palmanova y Punta Negra dos embarcaciones de excepción. Se trata del Sunrays, del magnate metalúrgico y del petróleo indio Ravi Ruia, cuya elegante línea conjuga con su color verde turquesa, inspirado en la decoración con elementos marinos que llena sus interiores, y del Kibo, de 82 metros, perteneciente al banquero ruso Alexander Mamut. Ambos cuentan con la participación en su diseño de Terence Disdale.

SUPERYATES.

El primero, con capacidad para 16 invitados, fue construido en 2010 por Oceanco en Holanda al coste de 100 millones de dólares. El segundo, con plazas para 12 invitados, por Abeking & Rasmussen en Alemania en 2014 al precio de 125 millones. Ambos disponen a bordo de las instalaciones propias de los yates más exclusivos, como piscina, jacuzzi, spa, garaje para embarcaciones y suites y salones con refinado lujo y estudiada decoración a lo largo y ancho de sus cinco cubiertas. El Sunrays además, cuenta con helipuerto y a veces viaja con su propio helicóptero, pintado igual que el barco.