Pep Socies, del restaurante Bri de Palma, prepara amb 'pa amb oli' con pan moreno, botifarra de sa Pobla, queso mahonés, aceitunas de Felanitx y un buen chorro de Oli de Mallorca. | Backwaren Gourmet

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El auténtico ‘pa amb oli’, según los usuarios participantes en el concurso de Backwaren Gourmet, se prepara restregando primero el tomate en el pan, después se añade el aceite y finalmente una pizca de sal.

Así lo han indicado la mayoría de los que han respondido a la llamada de la empresa en las redes sociales. Concretamente, un 43 por ciento del total optan por esta sucesión de pasos, y el 20 % incorporan la sal en segundo lugar y el aceite después.

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Muy pocos empiezan su ‘pa amb oli’ aplicando la sal o el aceite. El concurso arroja además otras conclusiones. El ‘pa amb oli’ genuino necesita que el tomate sea de ramellet, el aceite virgen Oli de Mallorca y, para algunos, mejor si el pan está ligeramente tostado.

Los osados añaden también a la fórmula magistral un diente de ajo, aunque no pocos ortodoxos calificarían esta innovación de pecado.

Sobre el pan, un buen companatge a base de queso mahonés, jamón serrano o camaiot resulta lo ideal, y como complemento triunfan las aceitunas, trencades o pansides, pero también hay quien recomienda verduras a la plancha o sepia.