Farbod Parvin, con un grupo de perros, en su chalet de Llucmajor. | Jaume Morey

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Cuando el dueño de un animal de compañía, generalmente un perro, decide irse de vacaciones, puede que se lleve a su mascota o puede que no. En ese segundo caso, existen varias alternativas para dejar al animal en las mejores manos posibles. Está claro que las personas necesitan vacaciones, pero quizás a los animales también les venga bien ?desconectar? unos días de su entorno.

La posibilidad más extendida es la de la residencia. Una de las pioneras en Mallorca está situada en Algaida, que lleva funcionando desde 1999. Se trata de la Residencia Canina y Felina Von Falkenau, dirigida por Martina Beckert y su familia. Un buen número de veterinarios de Mallorca recomiendan estos servicios a sus clientes. «No sólo eso, sino que entre los veterinarios que tienen perros o gatos también tenemos clientes». Hasta 2007, este lugar sólo acogía a perros pero desde esa fecha se convirtió también en residencia gatuna.

Martina Beckert.

Otra residencia, ésta sólo para perros, es Doggy Deluxe Mallorca VIP, enclavada en el municipio de Llucmajor. Farbod Parvin, un diseñador gráfico iraní, es su propietario. Parvin señala que los animales «están tan encantados aquí que a veces cuesta que vuelvan con sus dueños».

La otra opción es confiar el cuidado a un particular. Empresas como dogbuddy.com o holidog.com tienen muchos ciudadanos que se ofrecen a cuidar perros. Uno de ellos es Jesús Pérez, un informático gallego que lleva un año viviendo en Mallorca. «Hasta ahora, mi mujer y yo hemos estado con tres perros y la experiencia ha sido muy positiva».

Los precios de una residencia oscilan entre los 12 y los 30 euros y un particular se hace cargo de un animal por unos 10 euros al día.