Imagen del controvertido cartel publicado por el restaurante 'Heart Ibiza'. | R.D.

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El restaurante Heart Ibiza, de los hermanos Albert y Ferran Adrià, y de Guy Laliberté, creador del Cirque du Soleil, ha retirado un cartel publicitario de su negocio considerado «degradante e insensible» para la mujer por el Cesell de Ibiza, después de que fuera criticado por colectivos de la isla balear.

La dirección de Igualdad del Consell de Ibiza ha indicado este martes en un comunicado su «disgusto» con el cartel publicitario de la fiesta «Keep on Dancing», del restaurante Heart Ibiza, que muestra a cuatro mujeres de espaldas, desnudas de cintura para abajo.

La institución insular ha señalado que «deplora el uso denigrante del cuerpo femenino en campañas publicitarias», y ha considerado este cartel «un ejemplo del uso insensible y degradante que se hace de la imagen del cuerpo de la mujer con propósitos comerciales».

El Consell Insular de Ibiza también ha celebrado que la empresa haya retirado finalmente el cartel en favor de uno nuevo, y se ha congratulado de «la rápida reacción tanto de varios colectivos como de ciudadanos de la isla de Ibiza, que han propiciado que la empresa haya sustituido el cartel inicial».

«Resulta sorprendente que con el altísimo nivel de los diseñadores y artistas que trabajan en Ibiza, empresas prestigiosas decidan proyectar unas imágenes promocionales tan groseras y que se limitan a ofrecer el cuerpo femenino como un producto, como una mercancía para consumir y tirar» ha apuntado la directora de Igualdad del Consell de Ibiza, Judith Romero.

La directora insular, que ha expuesto su versión de la diferencia entre «el uso de la belleza del cuerpo con propósitos artísticos, y lo que es simplemente una muestra cosificadora y degradante de la mujer», ha invitado a las empresas de ocio establecidas en Ibiza a continuar apostando por las buenas prácticas y por la calidad a la hora de escoger la imagen pública de sus negocios.

«Ciertas campañas casposas que visualmente nos remiten a muchos años atrás dañan la imagen de la isla de Ibiza y, además, resultan completamente contraproducentes y contrarias a las políticas que se desarrollan desde esta dirección de Igualdad, destinadas a convertir a Ibiza en una isla de respeto y libre de agresiones sexuales», ha resumido Romero.