La monja Teresa Forcades, candidata a la presidencia de la Generalitat por una recién aprobada candidatura de confluencia para las elecciones al Parlament de Cataluña, durante la presentación de su libro "Por amor a la justicia", en Madrid. | Emilio Naranjo - Efe

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La monja benedictina Teresa Forcades permanece a la espera de que el Papa Francisco otorgue el «placet» a su exclaustración, que comenzó el pasado lunes con el visto bueno de la abadesa de Montserrat y del obispo de su diócesis, para implicarse activamente en la plataforma «Procés Constituent a Catalunya».

Forcades, que fue llamada por el Vaticano el pasado mes de mayo, ha explicado durante la presentación de su último libro, 'Por amor a la justicia', que se trata de una exclaustración por un periodo temporal de tres años y se ha mostrado confiada en que la Santa Sede no pondrá reparo en ello.

De hecho, ha indicado que no ha planteado alternativas en caso de que el permiso se le deniegue y ha afirmado que lo que haría es «convocar un gabinete de emergencia» y «retirarse dos días a rezar».

En cuanto a sus «primeras sensaciones» de la vida fuera del convento ha indicado que es algo «muy reciente» y que todavía le dura «la experiencia del domingo», cuando obtuvo el apoyo de la mayoría de Procés Constituent a Catalunya a su candidatura para liderar el proyecto de «una confluencia de partidos de izquierda para las elecciones catalanas» en contra de las políticas «neoliberales».

«A mi me ha parecido que el hecho de que yo me ofreciera para liderar esa confluencia podía ayudar a que se consolidara -ha explicado- hasta ahora no lo había hecho porque entendía que la condición para mi era dejar de ser monja. Se abrió la posibilidad de que pudiera hacer esto sin dejar de ser monja, pero con una exclaustración temporal, por un máximo de tres años».

En todo caso, ha afirmado que, hasta que obtenga una respuesta de la Santa Sede, dispone de un «permiso» para realizar actividades como la presentación de su libro, este martes, que ha tenido lugar en Madrid.

«Parece que las conversaciones previas con Roma... vamos, que sería una sorpresa si ahora no lo concedieran. Tendría que hacer gabinete de emergencia y a ver qué pasa», ha indicado.

'Por amor a la justicia'

En el volumen presentado este martes, aborda la vida y pensamiento de Dorothy Day y Simone Well, dos mujeres cercanas al anarquismo y «comprometidas» con los obreros de principios del siglo XX que «en su juventud tardía tuvieron una experiencia crística», según ha explicado la monja.

«Ellas quedan transformadas por esta experiencia. No es que a partir de entonces abandonen el que había sido su compromiso básico hasta entonces sino que quedan entre dos mundos», ha indicado.

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Según Forcades, «en buena parte del sindicalismo revolucionario y de la ideología anarquista» en la que ambas se desenvolvieron «resuena de forma potente el juicio de Marx: la religión es el opio del pueblo».

Sin embargo, la autora cree que ambas «son testimonio de que esa dimensión trascendente, consolida y radicaliza» el compromiso con la justicia, en lugar de apagarlo mediante la esperanza en el más allá.

El libro dedica además un capítulo a la reacción de ambas ante la Guerra Civil Española, durante la que Weil se alistó en las Brigadas Internacionales, aunque «su carrera militar duró solo dos semanas» porque «era muy torpe"; y ante la que Day se posicionó en su periódico en contra del levantamiento franquista pese a conocer «el ataque a las hermanas y hermanos de fe» que tuvieron lugar en el bando republicano, según ha explicado Forcades.

Para la autora, «las condiciones han cambiado» repecto a los inicios del siglo XX pero ha asegurado que todavía existe la explotación laboral y ha puesto el ejemplo de taxistas que trabajan «14 o 17 horas al día, seis días a la semana».

«La actualidad de este libro la siento completa, con las diferencias obvias, pero con una renovada amenaza de la explotación laboral más indigna, que nos hace decir que existe algo llamado pobreza laboral», ha subrayado.

Madrid

En este contexto, ha elogiado a la nueva alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, de quien afirma que «le emocionó» oírle citar a Simone Weil en una entrevista en lo referente a «la abolición general de los partidos políticos».

Ha cuestionado el actual sistema de partidos políticos como articulación de la pluralidad política y ha defendido que el sistema de financiación de estos «les obliga a entrar en deuda con los poderes financieros» y en el que «en muchos partidos no se practica la democracia interna».

En cambio, se ha mostrado confiada en que el programa con el que Ahora Madrid se ha presentado a las elecciones sirva para «consolidar la esperanza con hechos» y que «demuestre que en este país hay alternativas» frente al «discurso neoliberal» que defiende que no hay otra opción que los recortes.

En todo caso, ante la posibilidad de que finalmente no se lleve a cabo la medida de crear un banco público para financiar proyectos sociales y de empresas y cooperativas que «fomenten la economía productiva», ha indicado que «habrá que ver si es así» y que es distinto «no hacerlo inmediatamente o dejar de hacerlo». «Si es así, no empezaríamos bien», ha subrayado.