En cuanto a la estética, se trata de un vehículo que cuenta con un diseño idéntico a la del vehículo del cual deriva. No se trata de un diseño revolucionario, sino que es más bien sobrio pero bastante moderno. Los faros tienen una línea circular, aunque en esta versión no llevan la iluminación LED integrada, puesto que se encuentra por separado en el parachoques. La parrilla anterior es también bastante discreta.
La parte posterior del vehículo destaca por llevar unos faros de gran formato que acaban en el lateral del vehículo. Desde mi punto de vista, el diseño de los mismos podría ser un poco más vistoso, pero hay que reconocer que gracias a la iluminación LED, de noche el conjunto mejora mucho. Los parachoques son de dimensiones considerables, lo cual mejora la seguridad del coche.
MOTOR
El coche que hemos probado contaba con el propulsor 1.6 e-HDi de 115 CV, cuyas prestaciones nos han sorprendido agradablemente. La aceleración del coche con salida parada es realmente buena; entrega la potencia desde el principio sin que parezca que tenga límite. Así, los 11’3 segundos que tarda para ponerse de 0 a 100 Km/h son incluso reducibles.
En la recuperación el vehículo también cuenta con unas cifras muy razonables. Quizá donde el coche echa de menos más potencia es en la velocidad máxima, ya que al llegar a una cifra un poco alta el vehículo tiende a temblar un poco, como si fuera forzado.
En cuanto al consumo, los 3’8 litros que da la marca como cifra media es muy buena, pero nosotros, con una conducción mixta, hemos conseguido una media de unos 5’3, que es un dato más que digno para un vehículo de estas medidas y peso.
El comportamiento en carretera de este vehículo de tipo familiar no varía mucho respecto a la versión no familiar, aunque sí en las curvas se muestra un poco más «vago» a la hora de trazarlas. Se puede decir que los ingenieros de la marca francesa han acertado en la opción escogida de amortiguación, que absorbe perfectamente las irregularidades del terreno y no tiende a subvirar.
INTERIOR
El interior del nuevo 308 SW viene marcado por el diseño i-Cockpit y cuenta con un equipamiento bastante completo, en el que destaca la pantalla central táctil, mediante la cual se controlan gran parte de los ajustes del vehículo. Esta es de fácil manejo y la usan también otros vehículos de Citroën, también del grupo PSA, en los que también da un resultado excepcional, al ser muy intuitiva.
El espacio para los pasajeros posteriores es de lo más amplio, ya que tres adultos pueden ir sentados de forma cómoda, con un gran espacio para las piernas. Quizá el que no va tan cómodo es el conductor, sobre todo si es alto, ya que tiene menor espacio lateral para las piernas del que debería, lo cual se debe a que la consola central es demasiado voluminosa.
Además, la capacidad de carga del nuevo SW es de las mejores de su categoría. Los 610 litros que anuncia la marca pueden llegar a los 1.660 litros si abatimos el asiento posterior, que es mucho espacio.
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