El alcalde, Llorenç Gelabert, probando el arroz que se dio a degustar. | Lola Olmo

TW
1

Sa Pobla presumió este domingo y durante todo el fin de semana, de su buena gastronomía ligada al producto de la tierra; de los alimentos y artesanías de manufactura local y de su ingrediente por excelencia, el arròs pobler. El numeroso público que se acercó hasta la VII Fira de l’Arròs Pobler a lo largo del día pudo interpretar cómo es una marjal cultivada de arroz, gracias al montaje que se expuso en la Plaça del Ajuntament, epicentro de esta feria dedicada a un cereal con larga tradición en sa Pobla.

Producto estrella

Mientras el alcalde, Llorenç Gelabert, y los concejales poblers ejercían de anfitriones con las muchas autoridades invitadas durante el recorrido por las distintas muestras, en la plaza, Biel Serra ‘pepis’ y Tomeu Plomer elaboraban un gigantesco calderó de arròs pobler que el público pudo saborear.
Alrededor de la plaza se sucedían puestos de venta de arroces de calidad, embutidos, repostería, aceites y salsas picantes, en un pueblo donde la guindilla es un ingrediente fundamental.

En las calles adyacentes al centro se concentraron las muestras de caballos, animales, motos antiguas, coches, plantas, atracciones de feria, churrerías y una variada amalgama de puestos de venta. Todo un abanico de posibilidades que llenó las calles de gente hasta bien entrada la tarde. También se llenaron los bares y restaurantes adheridos a la muestra de recetas pobleres «Menjar bé a sa Pobla»