El bus lanzadera daba servicio entre sa Barralina y el párking de ses Covetes. | Jesús Jusué

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Un verano más, quien quiera ir al parque natural de es Trenc tendrá que hacerlo en vehículo privado o armarse de paciencia y prepararse para caminar. El bus lanzadera que unía sa Barralina con ses Covetes este año tampoco está en funcionamiento. El Govern alega que no ha sido posible poner el bus lanzadera por cuestiones técnicas, mientras que desde el

Un verano más, quien quiera ir al parque natural de es Trenc tendrá que hacerlo en vehículo privado o armarse de paciencia y prepararse para caminar. El bus lanzadera que unía sa Barralina con ses Covetes este año tampoco está en funcionamiento. El Govern alega que no ha sido posible poner el bus lanzadera por cuestiones técnicas, mientras que desde el Ajuntament de Campos, su alcaldesa, Xisca Porquer, asegura que «ni lo han probado» y reclama que en vistas al próximo verano se recupere este servicio.

El gerente del Consorci de Transports de Mallorca, Maarten van Bemmelen, explica que las nuevas barreras de protección que instaló el año pasado el Ajuntament en la carretera como sistema de contención de vehículos y para mejorar la seguridad de los peatones hacen inviable que pase el bus por dicha carretera. «Físicamente no puede pasar ya que hay determinados puntos en que si se cruza el minibús con un coche, este tendría que hacer marcha atrás, por lo que se genera un nuevo peligro», añade Van Bemmelen.

Las explicaciones del Govern no han convencido a la alcaldesa de Campos que mantiene que «Mobilitat no ha hecho ninguna prueba real». «Sorprende que ahora lo achaquen a las barreras de protección que tuvimos que poner nosotros y que sufragó el propio ayuntamiento con más de 70.000 euros. Colocamos carteles que queda prohibido el paso a camiones y grandes vehículos a partir de las 9:30 de la mañana, por lo que creemos que a partir de las 10 horas podría circular el bus», añade la alcaldesa, Xisca Porquer.

Otra opción que barajó el Goven fue retirar algunas de las barreras de contención para crear una especie de ‘apeaderos’ para los vehículos, una propuesta que la Polícia Local de Campos descartó por fatal de seguridad. Ahora desde el Govern estudian otras medidas, mientras Campos reclama que se recupere el servicio que transportaba cerca de 300 personas diarias antes de la pandemia.

Por otra parte, el Govern ha descartado recuperar el bus que conectaba la costa de Santanyí desde na Ravandella a s’Almunia y Cala Llombards. En este caso, el gerente del Consorci apunta que al abrirse el aparcamiento de Cala Llombards desincentivó el uso del transporte público. «En 2019 tenía una afluencia de 18 personas al día, por lo que no se utilizaba», apunta Van Bemmelen. Ahora, la línea regular de 517 hace paradas cerca de dicho aparcamiento.