El edificio Marina, de la calle Teodor Canet, fue precintado por peligro de derrumbe.

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Una parte de las ocho familias desalojadas el pasado 7 de julio del edificio Marina del Port d’Alcúdia por problemas estructurales denuncian que «el Ajuntament no ha administrado bien los supuestos 40.000 euros que han invertido en darnos alojamiento en un hotel, porque el sábado lo tenemos que dejar y nos encontramos con que no podemos alquilar nada», explica Sara Rosa, una de las afectadas.

Ahora aún quedan dos familias en el establecimiento hotelero y «aunque desde el Ajuntament se ha dicho que la mayoría de personas ya han encontrado hogar, no es cierto. Hay quien duerme de sofá en sofá, en trasteros o incluso en el interior de coches».

Según indican Sara Rosa y su marido Juan Pablo Zerón, «el Ajuntament dice que dispuso de una partida de 40.000 euros para el alojamiento de emergencia en el hotel, pero nosotros no necesitamos eso. Ese dinero se podría invertir en encontrar y ayudarnos a pagar un alquiler asequible, porque los técnicos nos han dicho que no podremos volver a nuestras casas hasta el mes de enero». El alcalde Domingo Bonnín ha asegurado que «no permitiremos que nadie se quede en la calle».