La vieja central térmica de Alcanada lleva 34 años cerrada.

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El Consell tendrá que pagar 300.000 euros para hacerse con la antigua central de Alcanada si quiere evitar que el bien catalogado acabe en manos del fondo extranjero Ginkgo. El plazo para que ejerza el derecho de tanteo finaliza el próximo 10 de julio. Tal y como publicó ayer Ultima Hora, el Consell valora adquirir la central diseñada por Vázquez Molezún (medalla de oro de Arquitectura) para garantizar su protección y, con ayuda de fondos europeos, desarrollar el proyecto estratégico Alcúdia Tech Mar. Este proyecto impulsado por el Ajuntament con la colaboración del Consell y el Govern quiere convertir la zona en un centro estratégico para la descarbonización con un centro universitario adscrito a la UIB.

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Cabe recordar que Endesa confirmó a principios de mayo la venta de los terrenos de la central    (cerrada desde hace 34 años) al fondo internacional Ginkgo. Fuentes próximas a la operación cifran en 24 millones de euros el coste de la descontaminación del terreno plagado de amianto. La nueva propiedad ha realizado más de 150 catas para calcular el coste de la descontaminación. La compra de los terrenos conlleva una responsabilidad de salud pública y ambiental.

Las mismas fuentes aseguran que la propuesta de construir varios bloques de viviendas para amortizar los costes ya no está sobre la mesa. Según su versión «eso forma parte de una propuesta primitiva» y en su lugar ahora se plantea crear un centro de biodiversidad marina y construir una ciudad empresarial para generar unos 800 empleos».

El apunte

«Estoy contenta e ilusionada por llevar a término el proyecto Tech Mar»

«Estoy muy contenta e ilusionada de saber que el Consell quiere ejercer el derecho de tanteo y comprar la central». La teniente de alcalde de Alcúdia, Bàrbara Rebassa (PSOE), muestra su satisfacción por la posición que ha adoptado el Consell de Mallorca después de que Endesa vendiera la central a un fondo extranjero. «Pienso que el hecho de que la propiedad sea de una administración garantiza el interés público y podremos continuar trabajando por el proyecto Alcúdia Tech Mar acabando con las especulaciones sobre si se construirán o no viviendas», añade.