Imagen de archivo de un pleno presidido por el alcalde Toni Mir.

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En plena crisis abierta en Cort, el PSOE tuvo que afrontar este jueves otro incendio político, declarado esta vez en Andratx y con su alcalde Toni Mir como protagonista. El primer edil tuvo que ver cómo sus propios socios de gobierno le daban la espalda en una reprobación planteada por el PP y que salió adelante gracias a los votos favorables de la oposición junto a los ediles del PI, y a la abstención de Més. Así, ni regionalistas ni ecosoberanistas apoyaron al alcalde en una votación de nula trascendencia ejecutiva, pero de enorme peso simbólico. Tanto, que ayer noche se convocó una reunión de urgencia por parte del PSOE insular con la que trazar una hoja de ruta a partir de lo ocurrido horas antes en el pleno del Consistorio.

El alcalde Toni Mir tiene claro en todo caso que los regidores que no le han apoyado deberían, por coherencia, abandonar el equipo de gobierno del cual siguen hoy formando parte. «Me parece surrealista», señaló a este diario un contrariado Mir minutos después de la votación en el pleno municipal. El voto del PI favorable a la reprobación lo sustentó la formación regionalista sobre la conveniencia de «expresar públicamente nuestro malestar por una situación que no hemos creado, y en la que en todo momento hemos intentado encontrar una solución».   

Mientras, Més quedó en tierra de nadie, con una abstención que trató de justificar Ruth Mateu durante el debate, pero que no convenció al primer edil, quien piensa que sus hasta ahora socios están actuando ya «en clave electoral«. Los ecosoberanistas entienden que el revés sufrido ayer no tiene porqué suponer el final del tripartito, y confían en cambio en que sí pueda marcar un punto de inflexión durante lo que resta de legislatura. Desde el PP, su portavoz defendió la reprobación del alcalde por los «continuos episodios de faltas de respeto y de mala educación», y por su «incapacidad –dijo Estefanía Gonzalvo– para gestionar y resolver los problemas de los andritxols». «Su actitud indigna –señala Gonzalvo– nos ha obligado a pedir su reprobación».

Por último, el regidor de Cs, Ángel Hoyos, puso el acento en el «abandono» al que los propios socios de gobierno del PSOE han sometido al alcalde con su reprobación. «Andratx merece otro gobierno y necesita otra alternativa», subrayaba el edil naranja tras un pleno que deja muchas incógnitas de cara a los próximos meses. Si Mir no presenta su renuncia tras lo ocurrido ayer, Ángel Hoyos deja claro que desde Cs apoyarán una moción de censura que permita al consistorio andritxol salir de lo que define como «un callejón sin salida».