Las últimas Àguiles que bailaron en Pollença lo hicieron el domingo después del Corpus de 2019. | Curro Viera

TW
0

Pollença recupera el próximo domingo 19 de junio el tradicional baile de las Àguiles, uno de los más singulares que se conservan en Mallorca, con reminiscencias medievales. Desde el lunes (tal y como manda la tradición) un grupo de bordadoras y voluntarias trabaja contrarreloj para coser una a una las joyas que lucirán las capas de las Àguiles encarnadas en esta edición por Joana Vives Moreno y Margalida Maria Malondra Bibiloni. Les acompañará Toni Llobera en el papel de Joan Pelós. Las Àguiles no bailaban desde antes de la pandemia por lo que este domingo es un día muy esperado por todos aquellos que velan por mantener viva esta tradición. Es la ‘joya’ ancestral de todo un pueblo en sentido figurado, pero también literal.

AGUILES1.jpg

La llegada de la pandemia y sus distintas oleadas, habían impedido hasta ahora recuperar esta tradición ancestral que solo conserva Pollença.   

Las capas de las Àguiles visten reliquias de otras épocas que las familias pollencines ceden cada año para cumplir con la tradición del Corpus. Cada joya va marcada con hilos de colores (una combinación diferente para cada familia) con el objetivo de evitar confusiones o pérdidas durante el proceso de ornamentación de las capas. No se recuerda en la historia de las Àguiles que se haya perdido ni una sola joya. Aina Cifre es la encargada de coordinar al grupo de voluntarias que ponen sus manos al servicio de la parte ornamental de la fiesta: Antònia Buades, Francesca Sales, Joana Suau, Maria Llitrà, Cati Vallori y Margalida Marqués. Este año por primera vez cuenta además con un estudiante de Moda, Toni Carbonell, que asiste como aprendiz, aunque de momento aún no cose las capas. Magdalena Vilanova, por su parte, es la persona que se encarga de velar porque el baile tradicional no se aleje de sus ancestros. Supervisa todos y cada uno de los ensayos y sus movimientos rítmicos.

AGUILES7.jpg

Nuevo itinerario

El regreso en sí del Ball de las Àguiles no es la única novedad del Corpus de este año. La procesión del domingo cambiará su itinerario habitual debido a las obras de peatonalización que el Ajuntament está realizando en la calle Jonquet. Después del Oficio del Corpus que se celebrará a las 18.30 horas en la parroquia de la Mare de Déu dels Àngels, las Àguiles, Sant Joan Pelós, la Custòdia y toda su comitiva iniciarán la procesión hacia la calle Temple, las plazas de l’Almoina y Monti-Sion. Al llegar a la calle de l’Horta, en lugar de continuar hacia a la izquierda girarán a la derecha para enfilar las calles Mena y Àguila. Continuarán hacia las calles Costa i Llobera y Joan Mas para después subir hacia la Placeta Martorell y las calles Coronel Aloy, Joan Guiraud y Desbrull. Volverán hasta la plaza Major de Pollença por la calle Antoni Maura y concluirán su itinerario en el portal de la iglesia. Este 2022, como no podía ser de otra manera, se recupera también la costumbre de, una vez acabada la procesión, realizar el Ball de las taules en diferentes lugares del pueblo.

El apunte

La crisis sanitaria ha dejado atrás la polémica del cordero en el zurrón

Antes de la pandemia Joan Pelós fue el centro de todas las miradas por la polémica sobre la obligación de eliminar el uso de animales vivos en las fiestas. En cumplimiento de la Ley de Protección Animal en las últimas ediciones el corderillo vivo que Pelós llevaba en su zurrón pasó a ser un simple bordado. La pandemia de coronavirus ha devuelto el protagonismo a las vistosas Àguiles y los pollencins ya cuentan las horas para verlas bailar.