Imagen general de la playa de Cala Varques, de Manacor. | J. SITGES

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Una lancha neumática dotada con dos socorristas se encargará este verano de la vigilancia de todas las playas vírgenes del municipio de Manacor. Esta es la principal novedad del servicio que la empresa pública SAM ha sacado a licitación por 1,8 millones de euros por los próximos tres años (571.000 euros al año). La SAM espera poder adjudicar la vigilancia de las playas a principios de este mes de abril para poder empezar a ofrecer el servicio desde el próximo mes de mayo y hasta octubre.

El vicepresidente de la SAM, el socialista Sebastià Nadal, explicó que se ha redactado un nuevo contrato de socorrismo de las playas de Manacor. Con este proceso, la calificación de algunos arenales de Manacor ha pasado de un nivel de riesgo bajo a medio, mientras que otros han mantenido el nivel de riesgo medio. Nadal indicó que con la adjudicación del servicio «se incrementará la vigilancia en las playas, y también en los arenales vírgenes, que nunca antes habían tenido este servicio».

Tras la adjudicación del servicio de vigilancia «se definirán los horarios y las frecuencias de esta lancha que controlará los arenales vírgenes», según palabras de Nadal, que añadió que «se dará cobertura a todas las calas comprendidas entre Cala Varques hasta Cala Antena». El Ajuntament adjudicará este servicio durante el segundo año que lleva la gestión directa de las playas del municipio. El Consistorio apostó en 2021 por municipalizar las playas y Sebastià Nadal dijo con anterioridad que «este sistema ha llegado a Manacor para quedarse».