Domingo Bonnín, presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores. | Lola Olmo

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Las cofradías de pescadores de Andratx y de Palma, junto con la Federació Balear de Confraries de Pescadors, presentarán alegaciones al decreto del Govern para unificar y ampliar las reservas marinas de Illa del Toro e Illes Malgrats, frente a la costa de Calvià. Los pescadores profesionales que faenan en esta zona se muestran a favor de la unificación de ambas reservas, pero consideran excesiva la superficie estimada que afectará, unas 2.800 hectáreas.

El presidente de la Federación, Domingo Bonnín, señaló que la entidad ha presentado un polígono alternativo que va desde la Punta des Castellot hasta el Morro d’en Feliu y algo más cerca de la costa. «Esta alternativa da una superficie estimada de 1.100 hectáreas, una cifra que multiplica por cuatro las 250 hectáreas actuales de las dos reservas».

Bonnín recalca que «las reservas marinas constituyen un bien preciado para el sector pesquero, las hemos apoyado o directamente impulsado; suponen una mejor gestión de los recursos y hábitats marinos, pero tan malo es no proteger como excederse; hemos de ser realistas, la flota pesquera balear está infradimensionada, la pesca se extingue, y tenemos que reflexionar si es eso lo que queremos, como afirman abiertamente algunas entidades ecologistas». El decreto sobre las reservas marinas de Ponent está en exposición pública hasta el 7 de marzo. Entidades ecologistas piden que se amplíen hasta la Illa del Sec, doblando el cabo de Cala Figuera. Esto superaría de largo las 2.800 hectáreas previstas por el Govern. Para Bonnín, «es inasumible».