Imagen del trabajo en Cala Varques. | CAIB

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El Servicio de gestión forestal de la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio y el Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat) han finalizado la segunda fase del proyecto de regeneración ambiental del espacio que, durante 12 años, ocupó el quiosco ilegal de Cala Varques, en Manacor, y que se desmanteló en septiembre de 2020 por orden judicial. Esta segunda fase ha consistido en sembrar especies propias de la zona como la mata, el acebuche, la sabina y el pino. Además, se ha repuesto la cuerda que delimitaba el espacio, puesto que la robaron, así como los palos que faltaban. También se han realizado tareas de limpieza del entorno y de reposición de las marras de la repoblación.

En un comunicado, la Conselleria ha recordado que la primera fase se ejecutó en el mes de mayo. Las actuaciones consistieron, principalmente, en la delimitación de la zona a restaurar con palos de madera y cuerda. Este cierre se reforzó con piedras y fajas de materiales vegetales del entorno. En septiembre de 2020, un operativo integrado por Agentes de Medio Ambiente, Policía Nacional, policía local de Manacor y el Ibanat precintó el chiringuito ilegal que, desde hacía años, funcionaba en Cala Varques. La actuación fue autorizada por el titular del Juzgado del contencioso-administrativo número 3 de Palma.

La abogacía de la Comunitat Autónoma de las Illes Balears había solicitado, a instancia de la Conselleria de Medio Ambiente, una autorización judicial urgente para poder ejecutar la resolución de ejecución forzosa del desmantelamiento de las instalaciones. Según la Conselleria, la necesidad de contar con una autorización judicial para ejecutar la actuación se basaba en que el propietario de las instalaciones disponía de un documento notarial que certificaba que el quisco era su domicilio. Por otro lado, el caso se encontraba judicializado desde mayo de 2019, cuando la Conselleria envió a la Fiscalía de Baleares dos expedientes administrativos relativos a este chiringuito ilegal para que estudiara la posible comisión de un delito de desobediencia por parte del propietario de la instalación.

De acuerdo con la Conselleria, esta denuncia se había presentado una vez se había constatado, hasta tres veces, la negativa del propietario de la instalación ilegal a desmontarla, en virtud de la resolución de conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, del día 17 de abril de 2019, donde se adoptaban medidas provisionales urgentes. Éstas consistían en retirar las instalaciones, el cese de la actividad de venta de bebidas y comida, así como del depósito de los bienes muebles asociados a esta actividad. A pesar de que el caso se encontraba bajo tutela judicial, la Conselleria consideraba necesario y urgente ejecutar la resolución y desmontar las instalaciones. Además de la numerosa documentación aportada por la Conselleria donde se denunciaban los daños medioambientales que provocó este quiosco ilegal, se aportaron informes de las consellerias de Salud y de Administraciones Públicas donde se alertaba que el quisco suponía un grave riesgo para la salud pública.

El conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, ha agradecido la labor hecha durante estos meses por el personal del Servicio de Gestión Forestal y del Ibanat, unas actuaciones que «han permitido recuperar un espacio natural altamente degradado y recuperar el entorno con especies propias». Mir ha destacado, además, el trabajo iniciado por el anterior conseller Vicenç Vidal, así como la colaboración con las consellerias implicadas, el Ayuntamiento de Manacor y los cuerpos de seguridad, «una tarea continua, discreta y coordinada que nos ha permitido finalizar con una anomalía histórica como era este chiringuito ilegal».