El lugar donde está proyectado el helipuerto privado de sa Muntanya. A 97,6 metros de altura sobre el nivel del mar, paralelos al Club de Vela. | Michel's

TW
22

Un proyecto privado pretende coronar el skyline del Port d’Andratx con un helipuerto privado. Concretamente, en una parcela situada a 97,6 metros de altura sobre el nivel del mar y a menos de un kilómetro de las urbanizaciones de Can Borràs y Monport. El propietario de dichos terrenos es el mismo promotor del proyecto que ha dado en llamar Helipuerto de Sa Muntanya.

Según fuentes del Govern, la última palabra a la hora de autorizar o no la ejecución de proyectos aeronáuticos de estas características la tiene el Gobierno de España, como administración competente en la materia. Sin embargo, otros 23 organismos nacionales y autonómicos (entre los que figuran desde la Delegación del Gobierno, hasta el GOB), se han visto a obligados a emitir un informe preceptivo al respecto de la mencionada infraestructura, pero en ningún caso vinculante. Será el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico quien, al margen de las conclusiones de estos 23 informes, decida si da luz verde al helipuerto. Cabe recordar que el director del gabinete de la ministra del ramo y vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, es el socialista menorquín y ex conseller de la presidenta Francina Armengol, Marc Pons.

El informe emitido por la Comisión Balear de Medi Ambient del Govern (CBMA) –recordemos, preceptivo, pero no vinculante– advierte de que la parcela afectada por el proyecto aeronáutico se encuentra clasificada como suelo rústico y declarada Área Rural de Interés Paisajístico. Una figura que, según el Plan Territorial de Mallorca, «no parece contemplar la posibilidad de la instalación de un helipuerto, al no aparecer dicha actividad en la relación de usos condicionados por la norma», apunta el informe la CBMA. «Sólo se podría autorizar cuando resultara declarado de interés general por el Consell de Mallorca», apostilla el mismo documento.

A favor del proyecto juega que su ubicación no se encuentra incluida en espacios de relevancia ambiental de la Red Natura 2000. No obstante, el informe avisa que sí debe tenerse en cuenta que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) establece que la zona de influencia del helipuerto responde a una circunferencia de cinco kilómetros de radio desde la plataforma de despegue y aterrizaje (de 577,32 metros cuadrados), cuyo diámetro total alcanza hasta tres espacios protegidos por la Red Natura 2000: el espacio marino del poniente de Mallorca, sa Dragonera y el Serral den Salat.

Así, la comisión de Medio Ambiente recomienda al ministerio someter el proyecto a evaluación de impacto ambiental ordinaria, aunque este tiene potestad absoluta para optar por una evaluación simplificada, no tan exhaustiva como la ordinaria. La comisión del Govern también advierte de que el proyecto generará principalmente emisiones contaminantes y sonoras, además de impactos negativos sobre la avifauna catalogada presente en el entorno. El proyecto de helipuerto sólo contempla su uso en horario diurno, por lo que no dispondrá de iluminación artificial. También calcula que el número de operaciones no rebasará las 40 anuales ni las 15 al mes.