La cementera, epicentro del proyecto. La fábrica de Cemex en Lloseta reanudó la producción de cemento en abril, dos años después del cese de su actividad y un ERE que acabó en el despido de 86 empleados, un caso que precipitó el apoyo del Gobierno y del Govern al proyecto que gira en torno al hidrógeno verde. | Lola Olmo

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Este miércoles comenzaron los trabajos previos para la construcción de un parque fotovoltaico en los terrenos que rodean la fábrica de cemento Cemex de Lloseta. Así lo anunció ayer el consorcio que promueve la construcción de una planta de hidrógeno, liderado por las multinacionales Acciona y Enagás, con la participación de Cemex como propietaria del terreno y el Gobierno central (IDAE).

La futura fábrica de hidrógeno será alimentada por dos plantas fotovoltaicas, con una duración de las obras de seis meses cada una. La de Lloseta tendrá una extensión superior a seis hectáreas, en las que se instalarán 16.660 paneles solares con capacidad para generar 8,59 MWp y una producción de 13.156 MWh/año, según los datos proporcionados por Acciona, compañía que lidera esta parte del proyecto. La de Petra, que ocupará unos solares propiedad del Govern balear, ocupará 10 hectáreas y contará con 12.740 paneles solares con capacidad para generar 6,5 MWp y una producción anual de 10.819 MWh/año.
Fincas rurales

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Las dos planta se rodearán de plantaciones de vegetación autóctona procedente de los terrenos en los que se ubican. «Se ha elaborado un plan para la gestión del arbolado existente que permita tanto su conservación, como su trasplante y en última instancia, su gestión sostenible», apunta Acciona. El proyecto global prevé que los terrenos que ocupen ambas plantas fotovoltaicas puedan tener usos ganaderos, como ser zona de pasto para rebaños de ovejas. Precisamente una de las críticas al proyecto desde el ecologismo es el impacto que pueda causar sobre el paisaje rural que ocupará.

Prevén ofrecer 160 empleos en las obras de los parques solares

Según los datos estimados ayer por Acciona, se prevé emplear a 80 trabajadores en la construcción de cada una de las dos plantas fotovoltaicas (Lloseta y Petra) y de la línea para transportar la energía. Acciona recuerda que tienen prioridad los afectados por el ERE de la cementera despedidos en 2019.