Los voluntarios de GADMA retiraron este sábado más de dos toneladas de residuos del lecho del torrente, entre otras, varias ovejas muertas. | Elena Ballestero

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«El torrente de Solleric se ha convertido en un cementerio de animales y la Administración no hace nada para evitar que los hechos se repitan, aunque estén tipificados como delito». Bernat Fiol, portavoz de Grup d’Amics del Medi Ambient (GADMA) denuncia los hechos después de que este fin de semana un grupo de voluntarios que trabajaba en la limpieza del torrente entre Consell y Biniali haya encontrado «15 sacos con perros muertos dentro y cinco o seis ovejas amontonadas». «Lo peor de todo es que no es la primera vez que sucede algo parecido. En el tramo del torrente más próximo a la carretera de Biniali siempre encontramos animales muertos, otras veces han sido sacos llenos de gallinas e incluso un cerdo», lamenta Bernat Fiol.

La acción de GADMA se enmarca en la campaña europea Let’s Clean Up Europe 2021 (LCUE) centrada en retirar residuos de zonas sensibles de la naturaleza. Esta vez han actuado en un tramo de 1,3 km del torrente de Solleric a su paso por Consell y Biniali.

Han retirado más de dos toneladas de residuos con la colaboración del Ajuntament de Consell.

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