El exalcalde Guillem Balboa. | Redacción Local

TW
17

La Oficina de Prevenció i Lluita contra la Corrupció de Balears ha abierto un expediente de investigación a los representantes de la anterior junta de gobierno de Alaró «por licitar y adjudicar un contrato de obra sin cumplir con la normativa de contratación pública».

La investigación se centra en el proyecto de la red separativa de aguas residuales y pluviales en la calle Pontarró y un tramo de la calle Can Manyoles. Según el expediente, el ayuntamiento de la anterior legislatura (formado por un pacto Més y PSOE) hizo esta licitación sobre unos terrenos situados en las carreteras Ma-2100 y Ma-2110, que son competencia del Consell de Mallorca, «sin requerir la oportuna autorización y sin disponer de los terrenos en el momento de la licitación».

La consecuencia de estos hechos supusieron que se resolviera el contrato a petición de la constructora adjudicataria por un valor de 3.561 euros y que se abonaran otros 13.668 euros por el pago del proyecto de obra.

Anticorrupció indica que estos hechos «pueden suponer presuntamente responsabilidad contable por parte de la unidad tramitadora» y cita al secretario municipal y a la junta de gobierno local, que en ese momento estaba formada por el entonces alcalde, Guillem Balboa (Més), y otros regidores como Aina Munar (PSOE) o Aina Sastre (Més).

Alegaciones

Tanto el exalcalde Balboa como los entonces regidores que formaban la junta de gobierno y el secretario han presentado alegaciones al expediente.

Guillem Balboa explica que «la junta de gobierno culminó un proceso iniciado previamente con los servicios municipales y con informes favorables de Secretaría e Intervención». Asimismo, el exalcalde de Més destaca además que «en el expediente de Anticorrupció se tienen en cuenta unos detalles, pero se obvian otros», explica.

Por su parte, la socialista Aina Munar recuerda que «el proyecto sigue disponible en el Ajuntament para que se haga realidad. El PP no lo quería de ninguna forma porque manteníamos el xaragall que pasa por casa de una regidora popular. Ahora quizá ellos lo hagan a su conveniencia», sentencia.