Toni Mir, frente a la puerta del Consistorio de Andrtax. | Michel's

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Tras casi tres lustros, un socialista ocupará la alcaldía de Andratx. Lo hará de la mano de Toni Mir (Andratx, 1962), un veterano de la política local que se ha estrenado esta legislatura como regidor y tomará el relevo al hasta ahora alcalde andritxol Joan Manera (Més).

¿Cuál será su primera decisión como alcalde?

—Asumir la Alcaldía a mitad de la legislatura acarrea seguir con la gestión pactada al inicio, por lo que no hay decisiones extraordinarias que tomar.

¿Qué objetivos se marca en los dos años que quedan de legislatura?

—Finalizar la mayor parte de los proyectos iniciados, algunos de hace muchos años, y plantear nuevas propuestas a largo plazo que debemos iniciar.

¿Qué ha aprendido de sus antecesores en el cargo?

—Muchas cosas y buenas. Entender la responsabilidad del cargo, conciliar en los posibles conflictos, mediar entre grupos políticos, etc.

¿Veremos esta legislatura la demolición de los apartamentos de Cala Llamp?

—Al iniciar la legislatura nos comprometimos a realizar todos los trámites necesarios para cumplir con la sentencia de demolición del año, aprobación del proyecto, dotación presupuestaria, licitación de la obra y contratación de la empresa adjudicataria. Toda la tramitación administrativa se finalizó hace meses y estamos a la espera de la autorización judicial para proceder a la demolición.

El PSOE vuelve tras casi 15 años a la alcaldía. ¿Dónde estaba usted entonces?

—En esos años había finalizado un periodo de siete años como presidente del Club Esportiu Andratx. Necesitaba recuperar tiempo con mi familia y mis negocios. Soy militante del PSOE desde hace más de 40 años y estuve participando en las actividades del partido.

¿Repetirá como candidato en 2023?

—Esta decisión la tomaremos en el momento pertinente entre los compañeros del partido.