Imagen de los trabajadores antes de iniciar los paros en los ocho municipios. | CCOO

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La huelga de recogida de basuras en el Raiguer arrancó en la noche de este jueves en medio de la incertidumbre. Mientras, por la tarde, la Mancomunitat había anunciado vía redes sociales la desconvocatoria del paro, los trabajadores decidieron tirar adelante con sus protestas y secundar la huelga. El motivo, el anuncio por parte de los alcaldes de la suspensión de los paros sin esperar que antes los trabajadores hubieran ratificado la propuesta al que habían llegado los sindicatos UGT y CCOO, la empresa concesionaria y la Mancomunidad.

En una reunión realizada por la noche, los trabajadores decidieron continuar con la huelga de recogida de basuras y, por lo tanto, solo realizar servicios mínimos, ya que la propuesta les llegó muy tarde y no tuvieron tiempo de convocar a todos los empleados que hacen el turno de las mañanas para departirla. «Como no se han podido reunir todos los trabajadores, se ha optado por mantener la huelga y este viernes a las ocho de la mañana se reunirán en asamblea para tomar una decisión», explicó responsable de UGT, Guillem Coll.

Por su parte, el presidente de la Mancomunitat del Raiguer y alcalde de Consell, Andreu Isern, explicó ayer que la entidad se había reunido a las 14:30 horas para intentar encontrar una solución al conflicto laboral. Este logró consensuar una propuesta que se ofreció después a los sindicatos CCOO y UGT con el objetivo de lograr el desbloqueo y que hoy los trabajadores decidirán si se aprueba o se descarta. Isern subraya «las dificultades jurídicas que existen porque nos encontramos con una contrata que acabará el próximo mes y con una nueva licitación del contrato de recogida de sólidos urbanos, por lo que el margen de negociación es mínimo en estos momentos».

La solución pasa por acordar con los sindicatos la adaptación de los sueldos de los trabajadores al futuro convenio colectivo autonómico del sector. El presidente de la Mancomunitat explicó que «una vez que se haya concretado este convenio colectivo compensaremos la diferencia que pueda existir en los sueldos fijados en los pliegos de nuestro futuro contrato de recogida de basuras del Raiguer».

La huelga afecta a ocho municipios (Alaró, Binissalem, Búger, Campanet, Consell, Lloseta, Santa Maria y Selva), mientras que Inca y Marratxí quedan fuera al tener un servicio propio de basuras. Ayer se confirmaron que se realizaron los servicios mínimos.

Otra de las convocatorias de huelga que se suspendió ayer fue la del Pla, que tenía que comenzar mañana por la noche. En este caso se esperará a la propuesta que la Mancomunitat del Pla haga a los sindicatos en la reunión que mantendrán el próximo jueves.