Reunión de la FELIB, que lleva meses negociando con Interior una salida a la carencia de policías locales. | Redacción Part Forana

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Los pueblos de Mallorca estudian reservar el 20 % de las nuevas plazas de policía local que salgan a concurso a los militares que han realizado el curso de formación y vayan a finalizar su relación con las Fuerzas Armadas. Esta fórmula –avalada por un acuerdo que cerraron Defensa y la Federació d’Entitats Locals de les Illes Balears (FELIB) en 2018– permitiría liberar a otros policías para cubrir las carencias de los municipios más pequeños, que se han ido quedando sin agentes en sus calles.

Fuentes de la Comandancia General de Baleares ven con «buenos ojos» la propuesta que ya aplican municipios de otras provincias de España. Pese a que el acuerdo con Defensa se firmó en 2018, en Balears ningún alcalde había incluido hasta ahora la reserva de plazas para militares en sus convocatorias.

El problema de base es que la demanda de policías locales es mucho mayor que la oferta actual en Balears. No hay agentes para todos y las condiciones laborales más atractivas que se dan en Palma (sueldos más altos y mejores turnos) hacen que, tras superar el periodo de formación en los pueblos pequeños, muchos agentes se marchen a Ciutat en cuanto ven la oportunidad.

La carencia de policías locales no es nueva, pero las dificultades derivadas de la ‘ley Montoro’ (que limita el incremento de plantillas), la negativa del Govern a crear un bolsín de interinos y las nuevas demandas de vigilancia derivadas de la pandemia, pasan factura a los ayuntamientos de la Part Forana.

«Desesperados»

El alcalde de Banyalbufar, Mateu Ferrà, ha enviado una carta a la Delegación del Gobierno advirtiéndole de que no se responsabiliza de vigilar el cumplimiento de las restricciones sanitarias por la pandemia. «Llevamos meses sin ningún policía local, tenemos la plaza convocada y queda desierta. Si hay que vigilar, que la Delegación del Gobierno mande medios», dice Ferrà.

El caso de Estellencs es muy ilustrativo. Su alcalde, Bartomeu Jover, explica que «hemos estado unos cuatro años sin policía y en verano conseguimos cubrir la plaza, pero en dos semanas se fue a otro pueblo».

«Antes a veces venían el policía de Esporles o el de Banyalbufar a echarnos una mano pero ahora ellos también están fatal. No puede ser que el Govern no saque plazas y que Palma nos ‘robe’ a los agentes», añade. Ferrà dice que la situación es «desesperada». «Yo ya he tirado la toalla», sentencia.

Costitx ha sido el último en quedarse sin policía en la calle. Llevan casi dos meses con la plaza vacante. El alcalde, Toni Salas, es además el presidente de la FELIB, que lleva meses reivindicando al Govern que dé una salida a la crisis.

La FELIB está realizando una radiografía exhaustiva de las policías (número total de plazas, plazas cubiertas, plazas vacantes y plazas en segunda actividad). Pide a la Conselleria d’Interior que siga la llamada ‘vía valenciana’ para formar nuevos agentes y convocar un bolsín de interinos del que se puedan nutrir los pueblos. La idea la puso sobre la mesa el alcalde de Andratx, Joan Manera.

A la espera de que Interior ofrezca una solución definitiva, la FELIB estudia ahora por primera vez reservar a los militares el 20 % de las nuevas plazas que salgan a concurso en los pueblos. Los interesados tendrían realizar el curso durante su periodo en el Ejército y aprobar la oposición para optar a ese 20 % de plazas.