La finca de es Tersal, adquirida por el Ajuntament, conecta el polideportivo con la plaza de Caimari. | Lola Olmo

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La finca de es Tersal de Caimari ha sido adquirida por el Ajuntament de Selva con el objetivo de trasladar el parque etnológico hasta estos terrenos, un paso necesario para desbloquear la construcción de la nueva escuela, un equipamiento reivindicado fervientemente desde hace años por las familias.

La finca tiene una extensión aproximada de 7.500 metros cuadrados y es colindante con la finca de ses Deveres, donde está ubicado el polideportivo municipal. Además también colinda con los terrenos en los que está previsto construir la nueva escuela pública, junto al recinto deportivo y las piscinas municipales.

Con la incorporación de esta finca al patrimonio municipal de Selva, se construye un eje de dominio público que va desde la parte posterior de la iglesia de Caimari hasta el camino de ses Deveres, con una extensión total de 21.000 metros cuadrados.

La adquisición de la finca se ha llevado a cabo sin coste para las arcas municipales, gracias a una subvención de 350.000 euros procedentes de la Borsa d’Allotjament Turístic.

El Ajuntament de Selva y la Conselleria de Turisme del Govern han suscrito un convenio por el que se destinan 279.000 euros a la compra de la finca y los otros 71.000 euros, al traslado de los elementos del parque etnológico a estos terrenos recién adquiridos.

Traslado inminente del Parc

El parque etnológico de Caimari es un centro de interpretación de los oficios tradicionales de la zona de montaña, con elementos como una barraca de carboner, una sitja, una casa de neu, un forn de calç o un coll de tords, entre otros.

El alcalde de Selva, Joan Rotger (PP), destaca la polivalencia de estos terrenos para desarrollar futuros proyectos de ordenación urbanística en el núcleo de Caimari. «Nos permite la ubicación de servicios como una zona de aparcamiento; la incorporación al espacio público del edificio de Cals Mestres; el acceso posterior desde el convento de Ca ses Monges –donde actualmente está situado de forma provisional el colegio Ses Roques– entre otras posibilidades que nos ofrece la conexión desde la plaza Major hasta ses Deveres con terrenos de propiedad municipal».

El traslado del parque etnológico será una de las primeras iniciativas y será dentro de los próximos meses, puesto que el Ajuntament de Selva prevé que el Govern inicie de modo inminente el proyecto de servicios de la finca de ses Deveres para la construcción del centro escolar.

Hasta la fecha, el Ajuntament de Selva tenía arrendada esta finca, que se utiliza cada año para diversas actividades, como algunos actos de la Fira de s’Oliva, entre ellos el concurso de perros pastor. «Además de que no hemos tenido que realizar ninguna inversión para comprar la finca, ahora nos ahorraremos el coste de su alquiler», señala Rotger, quien hace inciso en que «en su día y a propuesta del PP, el Ajuntament aprobó por unanimidad hacer una opción de compra de la finca, pero la nueva mayoría municipal surgida de la moción de censura que presentaron en noviembre de 2016 Arrelam, PI y PSOE, renunciaron a ella».

El nuevo colegio

La falta de un solar que se ajustara a la normativa ha retrasado durante años la construcción del ansiado nuevo colegio de Caimari. Finalmente, tras la elección del terreno de ses Deveres, la Conselleria d’Educació del Govern anunció que en el último trimestre de 2019 comenzarían las obras, un plazo que no se cumplió.

El nuevo colegio será de una sola línea, con 3 unidades de Infantil y 6 de Primaria. Actualmente Caimari cuenta con 73 alumnos.