La finca de sa Tanca de Can Domènech está situada frente al yacimiento de Pol·lèntia (al fondo de la imagen) solo separada del barrio residencial de sa Portella por la carretera del cementerio. | Elena Ballestero

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Con apenas un mes de diferencia el Consorci de la Ciutat Romana de Pol·lèntia se lleva uno de los peores palos de su historia. Si a finales de junio se anunciaba que por primera vez en más de 25 años este verano no habrá campaña de excavaciones en el yacimiento, también se ha confirmado que el Govern ha paralizado la compra de los terrenos para construir el futuro Centro de Arqueología Subacuática de Mallorca y Museo de Pol·lèntia en la finca de sa Tanca de Can Domènech de Alcúdia.

Los expertos en arqueología tardo antigua esperan desde hace años poder disponer de un centro en Mallorca equipado para recuperar pecios y restos subacuáticos de nuestra costa.

Ante notario

El Ajuntament d’Alcúdia y la propiedad ultimaban ya la firma ante notario de las escrituras de sa Tanca por 1,2 millones de euros. El Consell había anunciado en 2018 su compromiso de financiarla con los fondos del Impuesto de Turismo Sostenible.

La finca de Sa Tanca de Can Domènech está situada frente al yacimiento de Pol·lèntia, solo separada del barrio residencial de sa Portella por la carretera del cementerio. Los resultados preliminares de las prospecciones geofísicas realizadas en los últimos años revelan anomalías que sugieren, no solo la continuidad del barrio residencial, sino también de la casa de Polymnia.

La compra de los terrenos tenía el efecto inmediato de ampliar la zona de protección de Pol·lèntia, pero sentaba además las bases para hacer realidad el sueño de los científicos.

Las construcciones modernas existentes en Sa Tanca de Can Domènech y los terrenos de la parte norte de la finca donde aflora la roca natural se podrían utilizar para crear el Centro de Investigación Arqueológica Subacuática y Museo de Pol·lèntia que requeriría una inversión posterior de 3 millones de euros.

La actual emergencia sanitaria y económica ha llevado a Turisme a descartar parte de los proyectos que debían financiarse con cargo del impuesto sostenible este año. Hace semanas se confirmó que caía la compra del Castell de Alaró y ahora Alcúdia confirma que se para también la compra de sa Tanca. De nada sirvió la reunión que mantuvieron el pasado miércoles en Turisme, el conseller Iago Negueruela, la alcaldesa Bàrbara Terrassa y la propiedad. «Es una pena muy grande, pero nos dicen que en estos momentos no hay financiación», dijo ayer la alcaldesa de Alcúdia. Avisa de que «no me rendiré y seguiremos luchando porque las administraciones tenemos que hacer una apuesta seria y contundente para que Pol·lèntia tenga lo que se merece». Fuentes del Consell afirmaron ayer que tanpoco quieren dar el proyecto «por perdido» y que se volverá a plantear «en futuras convocatorias o buscando financiación alternativa».