Estado en el que se encontraba el área de aportación antes de instalar las cámaras de vigilancia. | Redacción Part Forana

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Mano firme contra los vertidos incontrolados. En solo una semana el Ajuntament de Sencelles ha interpuesto 13 denuncias sancionadoras a vecinos de la localidad por dejar basuras y trastos voluminosos sin control en el área de aportación de Cas Cabo. Cada uno de los infractores ha sido multado con 1.080 euros como fija la ordenanza municipal del ‘Bon Govern’.

La regidora de Educació, Esports i Serveis Municipals, Rosa Roca, asegura que esta acción no tiene una finalidad recaudatoria, sino que el objetivo es «poner freno» al descontrol de vertidos que «desde hace años se acumulan en el área de aportación». Como medida disuasoria, el consistorio decidió instalar cámaras de vigilancia en la zona, para así poder detectar las irregularidades. El pasado martes, día 9 de junio, se activó la videovigilancia y en solo una semana la policía ya ha detectado 13 infracciones, «más otras que todavía no hemos contabilizado», apunta la regidora responsable.

Cabe señalar que en esta área de aportación solo hay contenedores para depositar cuatro facciones de residuos (papel, plástico, cristal y rechazo). «Obviamos el contenedor de orgánico porque se llenaba de restos de poda», explica la regidora que recuerda que, el resto de trastos o residuos se deben dejar en el punto verde. Los vecinos tienen la llave para poder entrar al recinto (sin vehículos) y así depositar las bolsas en los contenedores.

En estos siete días de vigilancia han encontrado bolsas de cemento llenas de escombros, un remolque cargado de colchones, sillas de plástico, restos de hierro, o se han dejado electrodomésticos viejos. «Incluso hay dos sanciones porque los vecinos no debían tener las llaves del recinto y decidieron lanzar las bolsas de basura desde la barrera de la entrada; otros las han dejado fuera de los contenedores en el suelo», aclara la responsable del servicio.

Con las imágenes, la Policía Local ha podido identificar a los trece infractores y les ha remitido la multa pertinente que, en este caso, son todas de la misma cuantía.

Roca recuerda que incluso antes de ponerse en marcha la videovigilancia se encontraron con un vertido de uralita. «Queremos ‘poner orden’ en esta zona, hace demasiado tiempo que los vecinos sufren las consecuencias del descontrol. Esperamos que en dos semanas o menos el área de aportación esté en orden», sentencia.