Los usuarios de las playas de Alcúdia pueden alquilar desde ayer las hamacas que hay bajo las sombrillas de cañizo al precio habitual de 6,5 euros la unidad.
El de Alcúdia es el único ayuntamiento de Mallorca que presta directamente el servicio. Ha decidido mantener la plantilla de casi 60 trabajadores y ofertar el alquiler de hamacas y sombrillas a sabiendas de que, si no llegan turistas a la Isla, el servicio será deficitario. De hecho en la jornada de este lunes (hay que tener en cuenta también el mal tiempo) no se recaudó ni un euro.
Además de las hamacas y sombrillas, los bañistas pueden utilizar los baños públicos. La semana pasada se hicieron pruebas piloto de desinfección siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y en el plazo de una semana el Ajuntament confía en obtener el distintivo de playa segura contra la COVID-19.
Precisamente este lunes el regidor Domingo Bonnín dio cuenta de estas actuaciones al conseller de Turismo, Iago Negueruela de visita en la zona. Bonnín le pidió que Alcúdia pueda formar parte del plan piloto para recibir extranjeros este mes de junio si el Gobierno central autoriza un corredor sanitario.
10 metros en la orilla
Para garantizar la distancia social en sus playas el Ajuntament ha instalado un 25 % de su stock. Hay 8 metros de distancia entre sombrillas. Se reserva además un corredor libre en la orilla de 10 metros (cuatro más de los que recomienda Sanidad) para que los bañistas puedan pasear.
fugillama
Hace 10 meses
conozco a varios cobradores de hamacas, y me han contado algunas anecdotas que son tremendamente rocambolescas, gente que emplea las hamacas a primera hora de la mañana, y cuando observan que viene el cobrador, se lanzan al agua incluso sumergidos, hasta que se ha marchado no vuelven a la hamaca, y esto lo hacen repetidamente, pero el cobrador no puede tocar la ropa ni ningun objeto, ya que podrian demandarlos, total que se queda sin cobrarles ningun euro, incluso en algunas ocasiones la reaccion de los bañistas ha resultado ser muy violenta, con enfrentamientos y peleas, o sea que el trabajo de esta gente no suele ser muy facil, sino todo lo contrario, otra cosa es los dueños del negocio de las hamacas y sombrillas.