Visitar la Punta de n'Amer es una de las propuestas de los recorridos. | T. Vibot

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Los cinco municipios del Llevant de Mallorca (Artà, Capdepera, Manacor, Sant Llorenç y Son Servera) han hecho un frente común para adecuar y señalizar una ruta senderista de 193,78 kilómetros que permita recorrer el Este de la Isla a pie o en bicicleta. Se trata de un ambicioso sendero de gran recorrido (GR) que persigue conseguir un turismo sostenible con un coste que supera los 1,3 millones de euros. El proyecto se ha presentado de nuevo al Govern para que, en esta ocasión, pueda ser financiado con los fondos procedentes del Impuesto Turístico al entender que reúne los requisitos exigidos en la convocatoria.

El sendero de gran recorrido está distribuido en cuatro etapas, tres variantes y tres desviaciones. Es un trazado circular y se ha configurado con la idea de crear itinerarios más cortos para que los usuarios puedan elegir destino. Este sendero estará homologado para senderismo y cicloturismo. Ello supone un sello de calidad y reporta una serie de beneficios para los senderistas. La señalización del recorrido pasa un exhaustivo control de calidad por parte de los organismos homologados que garantiza su adecuación y eficiencia.

Los alcaldes implicados en esta propuesta destacan su idoneidad en el sentido que «son municipios que cuentan con excelentes infraestructuras turísticas y de comunicación, y tienen una posición estratégica en el mercado centro y norte europeo ya que suponen un importante foco de atracción turística en el periodo de marzo a octubre».

Para poner en marcha el proyecto se realizó un estudio de viabilidad y la red se diseñó en función de una serie de criterios. Así, las etapas discurren por todos los municipios y por caminos de titularidad pública.

Etapas

Se han previsto cuatro etapas: la primera desde Artà- la Ermita de Betlem- Alqueria Vella-Cala Mesquida- Cala Rajada y Son Moll; una segunda etapa que abarca Son Moll-Font de sa Cala-Provençals-Canyamel-Costa de los Pinos-Son Servera; la tercera etapa incluye Son Servera-Son Carrió-Sant Llorenç-Manacor y por último una cuarta que comprende Manacor-Artà. Posteriormente se van diseñando variantes y desviaciones para que los usuarios puedan elegir en función de los kilómetros que quieran hacer.

Los principales objetivos del proyecto son la desestacionalización turística con una propuesta alternativa al sol y playa que fomenta la protección y preservación del medio natural. La idea es convertirse en un referente de turismo regional y nacional con un turista responsable que conjuga deporte, naturaleza, gastronomía y cultura.

Con esta ruta también se recuperan y se ponen en valor los diferentes caminos de la zona que cuentan con un gran valor patrimonial y paisajístico.