Los ciclistas que pasan por el municipio y algunos senderistas ocupan casi la totalidad de la plaza a diferentes horas. | Redacción

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La presencia continua de cicloturistas en la plaza de Bunyola ha obligado al Ajuntament a comenzar la búsqueda de nuevos espacios públicos para los habitantes del municipio.
En una jornada laborable, la plaza puede llegar a acoger a más de trescientos cicloturistas, con picos que alcanzan los cien simultáneos. El problema se hace más notorio durante los fines de semana cuando los escolares podrían disfrutar de este espacio público pero se encuentran con una plaza invadida por ciclistas y sus vehículos.

Desde el Ajuntament de Bunyola reconocen que el hecho «de ser un lugar de avituallamiento para los ciclistas que regresan a Palma o van hacia Sóller supone un beneficio para economía local, sobre todo para los bares y supermercados», según indica el regidor de Economia y Hisenda, Miquel Pasqual. Por contra, también recuerda que «recibimos muchas quejas vecinales porque estos no pueden hacer un uso cotidiano de la plaza y los bunyolins y bunyolines se encuentran con pocas alternativas de espacios públicos».

Esta circunstancia ha provocado que los gobernantes municipales hayan buscado nuevos espacios públicos y salas multifuncionales, aunque algunas actuaciones dependen de la futura aprobación del Plan General de Bunyola.

Uno de los puntos en los que se quiere hacer más hincapié es el edificio de Can Gual. Se trata de una edificación a medio construir que se adquirió en la pasada legislatura y que el actual Consistorio prevé rehabilitar para convertirlo en un centro multifuncional.

El Consell de Mallorca ha dado luz verde a la situación legal de la construcción, por lo que se podrá llevar a cabo un proyecto para finalizar el edificio. La previsión es habilitar un aparcamiento para unos ochenta vehículos en la planta baja, además de alojar un centro médico y el centro de día. En la planta superior se construiría un gran espacio público que supondría un pulmón para las instalaciones municipales.

Los aparcamientos que ya funcionan en los alrededores de la estación también podrían contar en el futuro con una plaza, pero esta circunstancia ya depende de la aprobación del Plan General. El espacio cultural Climent Garau ya funciona para albergar actividades. En sus sesenta metros cuadrados ha acogido más de setenta actos desde su inauguración en 2018.