Uno de los objetivos de la tasa sería la financiación de espacios para perros, como este parque Agility. | Juanjo Roig

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La tasa anual por tenencia de perros que desde el área de Medi Ambient del Ajuntament de Inca se empieza a desarrollar cuenta con el apoyo del Colegio Oficial de Veterinarios y de la Plataforma Balear per a la Defensa dels Animals (Baldea), además de otras entidades de defensa sanitaria y sectorial de ovinos.

El regidor Àngel Garcia es el principal impulsor de esta propuesta y recuerda que «en las ordenanzas municipales ya se incluye la confección del censo de perros y ahora queremos abrir el debate de la necesidad de crear una tasa anual que serviría para poder seguir manteniendo e incluso aumentar los servicios que existen en Inca para los canes». Garcia insiste en el hecho de que «los últimos ataques a rebaños de ovejas son un problema serio y creo que quien tenga perros y los quiera no tendrá problemas en abonar una pequeña tasa que podría ser de 10 euros la primera vez y luego de 5 euros de forma anual».

El vicepresidente del Colegio Oficial de Veterinarios, Tolo Palou, considera que «no es que demos el total apoyo a esta propuesta sino que pensamos que incluso la cuantía a aportar podría ser mayor».

Servicios

Palou, que ha intervenido profesionalmente en la asistencia de las ovejas atacadas recientemente en el municipio, subraya que «Inca cuenta con diversos servicios como guardias medioambientales o instalaciones de agility que hay que mantenerlas por lo que los ingresos de esa tasa tendrían que utilizarse para mantener estas instalaciones y también para trabajar en la prevención de los ataques».

Desde Baldea también son de la misma opinión y su coordinadora, Maxi Lange, sugiere que «los ingresos podrían utilizarse para mejorar instalaciones como la perrera». También pide a los propietarios de perros en foravila «una tenencia responsable».

El Cepad interviene en el protocolo establecido por la Conselleria d’Agricultura en los ataques a ovejas. Su responsable, Toni Mas, explica que «las acciones que llevamos a cabo para coger a los perros no sirven para prevenir pero nos dan más información para ser más efectivos en el futuro». En 2018, intervino en 54 ataques a ovejas y capturó 49 perros.

Para Mas, la aplicación de la tasa en Inca «sería positiva y podrían depurarse mejor las responsabilidades. Existe en varios países europeos y funciona muy bien».