Cansado de esperar durante toda la legislatura que el Consell y la propiedad alcancen un acuerdo que garantice las visitas públicas a la Fortalesa, el alcalde de Pollença, Miquel Àngel March, insta ahora a los responsables del Consell a imponer por la vía de urgencia un régimen obligado de visitas. «Si después la propiedad quiere poner un recurso que lo haga, pero las visitas están amparadas por la Ley de Patrimoni», dice March.
Música, luces y una multitud bailando en una fiesta exclusiva mientras Idris Elba hace de DJ... Las primeras imágenes festivas que ha hecho públicas Netflix de su serie Turn up Charlie, contrastan con la demanda histórica frustrada de los pollencins para poder visitar cuatro días al mes la Fortalesa, tal y como marca la ley.
La demanda de visitas públicas se ha disparado en los últimos años a medida que la Fortalesa ha ganado prestigio como exclusivo plató de cine. Además, también ha acogido eventos y bodas de vips como la protagonizada por la modelo Helen Lindes y el jugador de baloncesto Rudy Fernández.
El alcalde recuerda que mucho antes que eso «en sus orígenes, fue una fortaleza pública, hasta que se privatizó, como gran parte de las fortificaciones de Mallorca, entre otras la del Castell del Rei».
Aunque no se trata de una competencia propia del Ajuntament hace ya más de un año que el consistorio envió al Consell un convenio para regular el régimen de visitas que copia el modelo que se aplica con éxito desde hace años en la almazara de Son Torrella en Santa Maria, también de propiedad privada y catalogada como Bien de Interés Cultural.
«Hemos hecho lo impensable por poner de acuerdo al Consell y a la propiedad pero llegados a este punto y viendo que la propiedad pone toda serie de excusas, el Consell tiene que tirar por la vía directa e imponer un régimen de visitas», añade March. Cabe recordar que la ubicación estratégica de la Fortalesa fue el principal argumento utilizado durante años para no regular los permisos de visita pública amparados por la ley de Patrimoni. Situada en una Península, se accedía originalmente a la propiedad a través de la base militar del Port de Pollença. No obstante, hace tiempo que el Ministerio de Defensa y el Ajuntament encontraron una vía para poder autorizar visitas reguladas y que el acceso no sea un impedimento.
15 comentarios
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La LEY sólo exige cuatro días de visita anuales e incluso el propietario puede poner las condiciones y elegir los días. Insistimos que es un BIEN DE INTERÉS CULTURAL y tiene que cumplir con el régimen de visitas.
Que den ejemplo y dejen entrar en su casa la señora Armengol, el señor Enseñat y el señor Mique A, March. Sino que dejen la propiedad privada en paz , como les gustaría a ellos.
Es un BIEN DE INTERÉS CULTURAL y eso significa que debe tener un régimen de visitas que la LEY exige.
El hotel tiene previsto hacerse para el 2021,y lo levara a cabo una empresa de Dubai. Es que si esperamos que hagan algo los mallorquines vamos apañao
Señor March, ustedes quieren invadir la propiedad privada desde todos los ámbitos, por vía política o haciendo la vista gorda con lis okupas, ahora bien si el tema se diera en alguna de sus propiedades seguro que ya no le haría ninguna gracia, por lo tanto entienda que una sociedad de consumo se basa en la ley de la oferta y la demanda, así que espero en las próximas elecciones la ciudadanía con su voto inteligente les heche a la calle porque de lo contrario Mallorca se convertirá en una isla llena de topmantas, vividores y okupas
La culpa es de Venezuela y los bolcheviques.Que aprendan del Pazo de Meiràs jajaja...
Es una propiedad privada, el que la quiera ver que lo haga en las fotos de Internet.
CUANDO ORGANIZARAN VISITAS GUIADAS POR LA CASA DEL ALCALDE???
Señor alcalde March, usted y su grupo se creen que la isla es de ustedes, le pondré un ejemplo, el parque de S’Albufereta, está muy bien convertir áreas en parques naturales pero esto si comprando las fincas, pues no, ustedes a los propietarios no nos han pagado ni un euro, y encima la gente puede entrar en nuestras fincas, esto es una auténtica dictadura y para más colmo, al señor Porto dueño del Hotel Club Pollentia cada año hace más reformas y el sí puede disfrutar y hacer negocio de un espacio en pleno parque natural en fin usted señor March al igual que muchos pollensines que lo votan tienen media Pollensa ilegal de construcciones ilegales en rústico por lo tanto antes de exigir deberían mirarse más a sus políticas dictatoriales
Es una propiedad privada. En su día se dio la opción de compra al Ayuntamiento de Pollença, si la hubiera adquirido, ahora si podría ser para el disfrute de todos. (O no, porque igual acababa como Planisi).