En el tramo de Alcúdia han repintado un carril preexistente sin reparar los baches y grietas y sin revisar el recorrido que está obstaculizado por numerosos alcorques. | Elena Ballestero

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El nuevo carril bici de la bahía de Alcúdia, reivindicado durante más de una década por Alcúdia, Muro y Can Picafort, ‘pincha’ unas semanas después del inicio de las obras para su ejecución.

El Ajuntament d’Alcúdia está indignado porque el Consorcio Bolsa de Alojamientos Turísticos se ha limitado a repintar el carril preexistente, incluso sobre baches y plantas. Por eso ha solicitado la paralización inmediata de la actuación.

Los técnicos municipales y del Govern se desplazarán este viernes a la zona para analizar la situación y valorar si se trata de una ejecución deficiente de las obras o bien si es necesario revisar el proyecto aprobado. «Lo que se ha hecho es absurdo, no solo no satisface las expectativas del Ajuntament sino que crea inseguridad, han pintado sobre las hierbas, está lleno de agujeros... es una barbaridad», explica el alcalde Toni Mir.

El alcalde informó al pleno sobre las deficiencias detectadas en respuesta a una pregunta de Carme García (portavoz de Unió per Alcúdia, en la oposición). Recordó que es un proyecto «antiguo» y dijo que personalmente no le gusta.

El carril para bicicletas de la bahía de Alcúdia, diseñado hace tres legislaturas, ha estado bloqueado durante años, primero por las dificultades económicas (el Ajuntament de Muro alegaba dificultades técnicas y legales para aportar su parte) y después medioambientales (Medi Ambient exigía garantías ambientales a su paso por la Albufera).

El proyecto original era mucho más ambicioso del que finalmente se ejecuta y preveía una inversión de 4,5 millones de euros. En su momento supuso un hito histórico al poner de acuerdo por primera vez a tres municipios para desarrollar un proyecto conjunto que no solo contemplaba la construcción del carril para bicicletas sino la comercialización del destino bajo una única marca turística: ‘Bahía de Alcúdia’.

El proyecto, tal y como se ejecuta ahora, se aprobó en el año 2012 y tiene una ayuda de 600.000 euros del Consorcio Bolsa de Alojamientos Turísticos. Recorre la carrera de Artà entre Alcúdia y Son Real. Las obras en Muro no han comenzado y las de Santa Margalida no han dado problemas.