El alcalde, Antoni Servera, y el regidor de Vies i Obres, Miquel Espases, en uno de los solares que se habilitarán en Cala Bona. | Assumpta Bassa

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Con el objetivo de dar prioridad a los peatones y humanizar la primera línea, el Ajuntament de Son Servera ha impulsado una serie de medidas para garantizar la movilidad y descongestionar de tránsito la zona costera. Una de las actuaciones más importantes consiste en la habilitación de hasta 400 plazas de aparcamiento en cala Bona, en segunda línea. Se trata de tres solares ubicados en l’Avinguda Magnolia que han sido alquilados por el Ajuntament para crear estas nuevas infraestructuras y que suponen un coste mensual aproximado de unos 1.200 euros.

Esta iniciativa municipal ha tenido una gran acogida tanto entre los residentes como entre los comerciantes de cala Bona ya que responde a una antigua reivindicación. Se trata de una zona donde, hasta ahora, el estacionamiento, era muy limitado.

El alcalde de son Servera, Antoni Servera, explicó a este periódico que «se trata de una zona muy concurrida, sobretodo durante los meses de verano, con mucha demanda de aparcamiento. Hay muchas viviendas y también está el tema de los accesos hasta la zona portuaria. De esta manera damos respuesta a una gran demanda existente».

Estas nuevas infraestructuras estarán distribuidas en unos terrenos de aproximadamente unos 5.000 metros cuadrados en total. «Queremos respetar el espacio dedicado a los peatones por encima de la circulación de vehículos. Por ello hemos buscado soluciones. El alquiler de estos solares se ha realizado por un periodo de cuatro años prorrogable», destacó Servera.

Cala Bona ha sido objeto de varias reformas y se ha convertido en uno de los destinos turísticos más competitivos. Se ha llevado a cabo un importante cambio circulatorio (frente al Hotel Levante) que afecta a la calle Tramuntana, Mestral y Migjorn. El sentido ahora será accediendo por Mestral y la salida por Tramuntana. El acceso quedará restringido a conductores autorizados y una restricción horaria para proveedores de 8 a 15 horas en días laborables. Los servicios públicos pueden circular sin restricción horaria.

Todos estos cambios son consecuencia de las obras de embellecimiento de la zona con el objetivo de dar una mayor fluidez al tráfico rodado, más seguridad y recuperar espacios para los peatones a la vez que favorece una movilidad urbana más sostenible.