Un operario sustituye una losa deteriorada en una calle del centro de Muro, esta semana.

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Los vecinos de Muro podrán celebrar nuevamente Sant Antoni montando foguerons en las calles empedradas del casco histórico. Desde 2010 (el año en que se semipeatonalizó el centro) a esta parte, el Ajuntament no autorizaba foguerons en esta zona del pueblo. Las obras de empedrado costaron 1,8 millones de euros.

El cambio de parecer del Consistorio se da gracias a una iniciativa presentada por el PSOE que lo solicitaba. Los socialistas recuerdan que el Consistorio ha denegado numerosas peticiones para hacer foguerons. La propuesta fue aprobada por unanimidad. Sin embargo, el gobierno (CDM, PI y PP) añadió que se hará un reglamento de foguerons para todo el pueblo, para el casco antiguo y el ensanche.

Por otro lado, el pleno aprobó otra moción de los socialistas que pedía la sustitución del empedrado del centro por otro compatible con el tráfico de vehículos. Desde su estreno hace diez años, el Consistorio ha gastado varias decenas de miles de euros cambiando losas deterioradas por el paso continuo de coches. El alcalde, Martí Fornés, indicó que ya se ha acordado intervenir en las calles de Sant Joan, Sant Jaume y Miquel Tortell.

Fornés informó que la opción escogida por el gobierno no pasa por sustituir el tipo de pavimento, sino por mantenerlo en el centro de la calzada y en lo que serían las aceras y quitarlo en la parte por la que circulan las ruedas de los coches. La intención del Ajuntament es realizar las obras a corto plazo.