Algunos puntos del camino transcurren sobre acantilados inestables. En tres años ha habido al menos seis accidentes graves, uno de ellos con resultado fatal.

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La Demarcación de Costas de Balears ha denegado al Ajuntament de Sóller la mejora de la seguridad en un tramo del llamado Camí dels Pintors que corresponde al término de este municipio –entre Alconàsser y Llucalcari–, argumentando que la mejora no se puede realizar si antes el Ajuntament no pone a su disposición los terrenos necesarios.

El jefe de la demarcación de Costas en Balears, Carlos Simarro, justificó así durante el último pleno ordinario –interviniendo en su condición de concejal del Ajuntament– que el organismo que él dirige haya denegado la petición municipal de colocar elementos de seguridad como hizo Costas en 2015 en otro tramo del mismo sendero correspondiente al término de Deià, entre Llucalcari y la Cala.

Simarro hizo esta aclaración en el turno de ruegos y preguntas del pleno, aunque el equipo de gobierno no le hubiera requerido para ello, y aseguró que la petición municipal «no puede ser atendida ya que existen tramos de este camino que no se pueden arreglar a pesar de ir sobre la zona de dominio público». Ello se debe a las malas condiciones del terreno y a que la mejora precisa que el Ajuntament «expropie primero o llegue a acuerdos con propietarios de la zona de influencia para poder desviar estos tramos», como, según el jefe de Costas, «sí hizo el ayuntamiento vecino».

No obstante, el Consistorio solleric argumenta que lo único que se pide a Costas es que «coloque medidas protectoras para los caminantes en los puntos más peligrosos tal y como se hizo en Deià y no un nuevo trazado».