Imagen del edificio a medio construir en la localidad. | Joan Socies

TW
0

Tras once años de polémica y paralización de las obras, el edificio de la asociación de tercera edad puede ser una realidad en breve. La asociación de personas mayores aprobó el domingo ceder el edificio a medio construir al Ajuntament de Ariany que se hará cargo de la finalización de las obras.

El motivo, según explicó ayer el propio alcalde Joan Ribot, es que la asociación no podía afrontar el gasto de la finalización de las obras, que podría ascender a unos 300.000 euros. Por ello, los mayores han acordado ceder el edificio al Ajuntament que lo reconvertirá en un centro polivalente donde la Tercera Edad tendrá derecho prioritario a su uso.
«Hace años que se apostó por esta solución, pero la directiva de la asociación no estaba de acuerdo, ahora la nueva directiva ha apostado por la cesión, con lo que de desbloquea un problema complicado de más de diez años que daba mala imagen al municipio» explicó Ribot, mientras remarcaba que «el edificio será del pueblo y para el pueblo».
Antes de llegar a esta decisión, la directiva de la tercera edad recurrió al Consell de Mallorca para solicitar ayuda. Participació Ciutadana medió entre el Ajuntament y la asociación para poder alcanzar un acuerdo viable que el domingo se ratificó en asamblea.

El alcalde es prudente por lo que respeta los plazos de las obras, ya que para la finalización precisan de 300 mil euros, casi la mitad del presupuesto anual del Consistorio. Por ello solicitarán ayudas a Desarrollo Local del Consell.

La construcción del edificio se inició hace once años con polémica subvención de la Conselleria de Presidencia del Govern Matas, que donó 274 mil euros a la asociación de la Tercera Edad para hacer su centro, aunque en los documentos oficiales fijaba que debía ser un centro de día. Las obras se iniciaron pero el coste fue muy elevado y la entidad jamás tuvo dinero para finalizarlo.