Los jóvenes han participado en el proyecto para aprender un oficio en el ámbito del mantenimiento de edificios. | Gori Vicens

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Nueva vida para la antigua escuela rural de Son Proenç, que se ha reconvertido en un local social y en un albergue gracias a un proyecto de ocupación y formación cofinanciado por el Ajuntament y el fondo social europeo.

Un total de 10 alumnos -trabajadores y monitores han llevado a cabo una reforma integral tanto del interior como del exterior del edificio que, desde 1934 hasta 1975, fue una escuela. Durante décadas estos espacios realizaron una gran función educativa en los barrios y lloguerets. En ésta incluso algunos años contó con una veintena de alumnos.

Junto a la escuela hay la casa donde vivía el maestro que se ha transformado en el albergue mientras que la escuela queda como una amplia sala para realizar diferentes actividades y usos comunitarios del llogaret para que puedan hacer reuniones, fiestas populares y la idea es que se pueda abrir a las diferentes asociaciones del municipio.

Por otro lado, también tendrá un uso lúdico para los ciudadanos en general, para celebraciones de fiestas privadas y algún tipo de acontecimiento. Finalmente también se le quiere dar un uso turístico dirigido esencialmente a excursionistas y ciclistas dada la ubicación estratégica de la escuela.

La regidora d’Ocupació, Elena Carrillo, explicó que «actualmente se está estudiando el sistema de gestión, preparamos el reglamento de usos y las ordenanzas de los precios».

La intención del Ajuntament de Felanitx es coger la escuela de Son Proenç como una experiencia piloto en el municipio y en función de su aceptación y funcionamiento no se descarta intervenir en otros espacios como puedan ser la escuela de Son Valls o de Son Negre. El proyecto cuenta con un presupuesto de 345.000 euros.