La carretera de Felanitx a Porreres separa las edificaciones que se localizan en la finca de titularidad pública. | Gori Vicens

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A pocos kilómetros del núcleo de Felanitx, detrás de un gran masa de arbustos, se encuentra la tercera zona húmeda más importante de Mallorca. Se trata de Son Navata, que tras s’Albufera y el Salobrar de Campos, cuenta con un gran número de aves acuáticas invernantes. Y todo ello pese al abandono que sufre la finca desde hace más de una década.

La finca ha quedado sumida en el abandono, con un deterioro constante, aunque también hay que señalar que esto ha servido para que las aves puedan disfrutar de una mayor tranquilidad. De aquellos primeros proyectos nunca más se ha sabido. Desde la Conselleria de Medi Ambient manifiestan ahora que en los últimos años el abandono había sido aún mayor.

Ahora ya se han establecido toda una serie de medidas para evitar el constante deterioro de la zona. Es por ello que ya se ha adjudicado, por valor de 41.300 euros, las obras de vallado de la finca, así como la limpieza de la misma y distintas medidas contra el constante deterioro de las casas de la possessió de Son Navata.

Esta importante zona húmeda que ha cobrado importancia con el tiempo es, de hecho, una construcción artificial. A finales de los años noventa, y después de más de 15 años de estudios, el GOB propuso la conexión de esta charca con la depuradora de la localidad, aunque el proyecto propuesto también quedó a medias.