Este año se prevé una gran afluencia de gente a la fiesta del Much, que se celebrará el próximo domingo. | M. VIDAL

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Aunque la ordenanza municipal sobre el consumo indebido de bebidas alcohólicas en la vía pública se aprobó en el año 2010, no ha sido hasta ahora que el Ajuntament la ha tramitado y ha entrado en vigor. Así, durante las fiestas patronales, que se celebran actualmente, se podrá multar hasta con 3.000 euros la práctica del botellón.

De hecho, y debido a que la multitudinaria fiesta del Much este año cae en domingo, desde el Consistorio han tomado la medida de reforzar la presencia policial «y se destinarán una o dos patrullas únicamente a las zonas de aparcamiento como son el Camp d’en Pineta, el Pou Llevoner o el polígono para combatir el botellón», señaló la regidora Magdalena Gelabert.

La tramitación de la ordenanza llega seis años después de su aprobación en el pleno debido a la «dejadez» del anterior equipo, que guardó el texto en un cajón en lugar de tramitarlo. Con la publicación de la ordenanza en el BOIB «conseguimos dotar a la Policía Local de una herramienta para que pueda actuar en contra del botellón», afirma el alcalde Miquel Gelabert.