Algunos niños y niñas con l’amo en Tomeu, este miércoles, en Sineu. | Antoni Pol

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«Letizia y sus hijas estuvieron una vez en el corral con los cerdos, pero llevaba gafas de sol y no me di cuenta de quién se trataba hasta que marchaban. Luego sí que la identifiqué. Más adelante coincidimos en una reunión de cooperativas en Zaragoza. Le expliqué quién era yo y le pregunté si se acordaba de mí. Me preguntó si la reconocí...», recuerda Tomeu Torres (Artà, 1949). Hace 25 años que Torres, más conocido como «l’amo en Tomeu de Son Marron» o «des porcs negres», acude con una cerda y su media docena de crías al mercado de Sineu todos los miércoles en qué no hay colegio.

Tomeu Torres es el presidente de la asociación de criadores de porc negre. Acudiendo al Dimecres, Torres divulga y promociona la raza autóctona mallorquina de cerdos. Su puesto es un corral cerrado por dos vallas metálicas con una cerda y sus crías. Suele estar a rebosar de niños deseosos de tocar los animales y hacerse una fotografía. «Comencé yendo al Dijous Bo y a otras ferias. Luego vinieron los Dimecres. Inicialmente yo permanecía dentro del corral y daba los cerdos a los niños; luego lo cambiamos para que ellos pudieran entrar directamente en el vallado», rememora Torres.

Autoridades

Además del Dimecres, la presencia de Tomeu Torres es habitual en las ferias. Las autoridades, conocedoras de que una foto con una porcelleta negra de un par de semanas tiene un componente mediático, acostumbran a pararse en su corral.

¿Hasta cuando su presencia en las ferias y mercados? «Veremos. Hasta que el cuerpo lo aguante. Esto es un trull y algún día tendrá que dejarlo», reflexiona.

El próximo jueves, la delegación de la Obra Cultural de Sineu le otorgará el premio Díngola, un galardón que la entidad otorga a las personas que «han supuesto un valor especial» para el municipio.