Imagen de archivo del mercado municipal sometido a varias reformas. | Lluc Garcia

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El nuevo reglamento del mercado municipal de abastos, aprobado definitivamente en enero de este año, ha terminado ante los tribunales. Diez de los concesionarios de los puestos de venta –pertenecientes a la Agrupació de Comerciants del Mercat de Sóller– han interpuesto un contencioso-administrativo contra la aprobación definitiva de este reglamento por parte del Ajuntament, después de que el Consistorio desestimara meses atrás su alegación en la que consideraban que el Ajuntament no les debería repercutir, además de las tasas establecidas, los gastos de limpieza y de luz del recinto.

Las discusiones entre los concesionarios de los puestos de venta del mercado y el Ajuntament se remonta al año 2010, cuando el Consistorio les ofreció ampliar en 10 años más la concesión administrativa, que ya llevaba varias años caducada, con la condición de que los placers ayudaran económicamente a la reforma del edificio.

Los comerciantes, que efectivamente colaboraron económicamente en la reforma, se escudan en este convenio para no pagar los citados gastos, que se les han ido retornando hasta la aprobación del reglamento. Éste establece que estas cantidades «serán repercutidas entre todos los puestos de venta».

Entre otras cuestiones, los comerciantes consideran que no se les pueden cargar los gastos correspondientes a puestos de venta que, a pesar de sus peticiones, siguen sin adjudicar, pero computan.