El director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant; el conseller Vicenç Vidal; el patrón mayor de la cofradía de pescadores, Pep Mayol; el alcalde de Sóller, Jaume Servera; el regidor de Medio Ambiente, Pep Lluís Puig; Rafel Solivellas, del club Náutico; Gori Mayol, de la cofradía y Andreu Castanyer, regidor de Infraestructuras y Servicios. | CAIB

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El establecimiento de una reserva marina de interés pesquero en la costa de la Serra de Tramuntana podría multiplicar entre cinco y veinte veces la presencia de peces en la zona en un plazo de tres años, según la Dirección General de Pesca y Medio Marino.

El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha solicitado por carta la creación de dicha reserva marina al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y ha advertido de que la pesca artesanal desaparecerá de la costa noroeste de Mallorca si continúa el declive de una zona donde en los últimos quince años se ha perdido el 75 % de la población de peces.

Vicenç ha explicado este viernes dicha petición en el Ajuntament de Sòller, a la cofradía de pescadores de la localidad y la Federación Hotelera del municipio, ha informado la Conselleria en un comunicado.

En la carta enviada el 30 de octubre, el Govern insta al Ministerio a establecer una reserva marina de interés pesquero en la costa de la serra de Tramuntana, concretamente en Sóller, donde el ejecutivo autonómico no tiene competencias por tratarse de aguas exteriores.

El conseller Vidal ha recordado al Ministerio que hace años que se viene reclamando la creación de una reserva marina en s'Illeta de Sóller, una iniciativa que se amplió en 2010 a raíz de un estudio de la zona que constataba la situación de sobrepesca y la gran potencialidad de recuperación de estos recursos.

La nueva iniciativa proponía, basándose en «criterios técnicos y operativos, un área de reserva mayor», entre ses Puntes y el morro de en Llobera, con una extensión de 5.000 hectáreas.

Según la Dirección General de Pesca y Medio Marino, la costa de la Tramuntana tiene una potencialidad enorme, pero hay menos de un 10 % de la pesca que podría haber. En un plazo de tres años una reserva marina podría multiplicar por cinco o por veinte el número de peces de la zona, según la extensión que se le dé.

Los datos amparan que el Govern apoye la propuesta, ha asegurado Vidal, quien se ha mostrado convencido de que, si no se actúa, la pesca artesanal desaparecerá en esa zona.

El conseller solicita a la Secretaría General de Pesca que establezca una reserva marina pesquera u otra medida alternativa en las aguas exteriores de la Tramuntana de Mallorca, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y se muestra dispuesto a colaborar en su gestión.

El alcalde de Sóller, Jaume Servera, ha dicho estar «encantados» con la iniciativa de la Conselleria en apoyo a esta propuesta que cuenta con un amplio consenso.