Toneladas de desperdicios que deben retirarse en un tiempo récord para dejar la zona en condiciones para el turismo diurno. A las seis y media de la mañana la brigada de limpieza de la empresa municipal Calvià 2000 entra en acción.
Un total de 31 operarios y 13 vehículos efectúan la limpieza a fondo de la zona, que abarca la avenida s’Olivera, la avenida Pere Vaquer, Cala Blanca, Martín Ros García, Punta Ballena y la avenida Magaluf, con el compromiso de finalizar a las 10.00 horas como hora límite.
Un operativo que se pone en marcha a partir de Semana Santa hasta finales de septiembre (siendo a principios de junio y a finales de agosto el periodo de más actividad) recorre las calles y aplicando distintas técnicas de limpieza.
Técnicas
Además de la tradicionales de barrido mixto (barredora más dos peones de apoyo con soplador eléctrico) y unidad móvil (dos operarios con camión caja abierta recogida residuos y papeleras, limpieza manual de puntos negros), se aplican técnicas de baldeo (limpieza con manguera y camión cuba con alto caudal a baja presión) y fregado con agua caliente (hidrolimpiadora a alta presión y alta temperatura más productos químicos de limpieza).
A pesar de la conflictividad de la zona los operarios de la empresa municipal Calvià 2000 tienen experiencia en este tipo de entornos y saben manejar las situaciones para que, prácticamente, nunca se produzcan altercados.
En el caso de que llegue a producirse algún tipo de conato, los operarios nunca intentan controlar la situación por ellos solos, siempre evitan el enfrentamiento y llaman a la Policía Local que siempre actúa rápidamente.
Últimamente también prolifera la presencia de gaviotas, pero no son problemáticas al centrarse solo en los desperdicios del suelo, no como en otros puntos del municipio donde rompen las bolsas de basura y esparcen los residuos.
Poco antes de las 10.00 hora empiezan a finalizar las tareas y empieza a verse el asfalto de las calles cuyo aspecto mejora para afrontar otro nuevo día y volver a ser cubiertas de cartones plásticos y cristales, un ciclo que solo a finales de la temporada turística empezará a remitir.
El balance diario de la recogida de basura en la zona deja cifras cercanas a las 10 toneladas de residuos (solo en Punta Ballena), de las cuales unas dos toneladas se recogen directamente del suelo.
En lo tocante al coste económica que de esta operación de limpieza exprés representa para las arcas públicas, cabe apuntar que registra un coste de unos 3.600 euros diarios solo durante los meses de la temporada alta turística.
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