Imagen de los podencos ibicencos del Camí des Vinyet d'en Canals frente a los bidones donde viven.

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Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil inspeccionaron ayer el solar del Camí des Vinyet de'n Canals de Llucmajor en el que nueve podencos ibicencos viven en otros tantos bidones, atados a los mismos por una cadena de dos metros de longitud y a pleno sol.

Tras la información publicada ayer al respecto por este diario, el teniente del Seprona en Llucmajor se reunió con el teniente de alcalde de Medio Ambiente y Urbanismo del Consistorio llucmajorer , Joan Amengual (PP), para consultar los expedientes que la Policía Local abrió contra el propietario de los perros en cuanto tuvo constancia de las condiciones en que vivían los canes.

Cadenas

Una vez examinada la documentación (entre la que figura un informe policial que asegura que los podencos presentan un buen estado, que no les falta comida ni agua, pero sí sombras que los protejan del sol) agentes del Seprona se desplazaron hasta el Camí des Vinyet de'n Canals para inspeccionar la zona y determinar si se trata de un caso de maltrato animal.

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La voz de alarma la dio la Plataforma Balear Para la Defensa de los Animales (Baldea) que alertó de las altas temperaturas que llegan a alcanzar los toneles de chapa, con techo de uralita, expuesto todo el día al sol en pleno verano.

Denuncia

Tanto Baldea como otras organizaciones animalista mantienen que está prohibido utilizar bidones para alojar animales, al tiempo que recuerdan que las cadenas a los que permanecen atados deben contar con una longitud cuatro veces mayor al tamaño del perro, desde el hocico hasta la cola.

Tal y como publicó ayer este rotativo, en cuanto el Ajuntament tuvo constancia de las denuncias, procedió a abrir un expediente informativo que, posteriormente, tras constatar que los perros se podían encontrar en una condición delicada debido a la falta de sombra, derivó en otro sancionador.

Sin embargo, el propietario de los canes decidió recurrir el expediente sancionador, lo cual ha dilatado el procedimiento administrativo encaminado a solventar la situación. No obstante, ahora, con la intervención de la Guardia Civil, la resolución del litigio podría acelerarse de forma considerable.