La vivienda de la derecha, situada en la calle Creus, se construyó con licencia municipal. | Elena Ballestero

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El Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) ha impuesto una multa de 1.000 euros al alcalde de Pollença, Bartomeu Cifre (PP, por el incumplimiento de una sentencia del Supremo que ordena la demolición de una vivienda construida con licencia municipal en la zona del Calvari (calle Creus) en el año 1991. La resolución del TSJB es del pasado 12 de julio pero el alcalde no recibió la notificación hasta el pasado martes. Cifre ultima la presentación de un recurso contra esta resolución. El plazo para recurrir espira el viernes.

El alcalde deberá responder con su patrimonio personal del incumplimiento de la sentencia de demolición y la multa le será reiterada cada diez días, a razón de 100 euros diarios, hasta la total ejecución del fallo judicial.

El TSJB explica que «la ejecución de la licencia dictada el 11 de noviembre de 1993 se viene demorando desde el año 2004, siendo firme desde el 20 de octubre de 1999», e invita a la parte codemandada (la propietaria de la vivienda cuya primera planta debe ser demolida) a «utilizar, en su caso, las vías que correspondan por los perjuicios ocasionados por la anulación de la licencia concedida por el Ajuntament».

El alcalde dijo ayer que «considero desproporcionada la multa de 100 euros diarios teniendo en cuenta que mi sueldo es de 2.140 euros y que el Ajuntament ya ha redactado y aprobado el proyecto de demolición, ha hecho la tramitación contractual y ha habilitado el crédito necesario».