El Seprona de la Guardia Civil se encarga de controlar las actividades en las playas. | Joan Sitges

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El Ajuntament de Manacor y la empresa concesionaria de los servicios y seguridad de las playas y calas vírgenes del municipio han llegado a un acuerdo para ampliar el horario de vigilancia que cumplen los socorristas.

Así lo informó ayer en el pleno, a raíz de una pregunta de PSM-IV-Entesa, el delegado de Turismo, Joan Gomila, que afirmó que «en los meses de mayo y octubre el servicio de vigilancia pasa de cuatro a cinco horas, en junio y septiembre de seis a siete y los meses de julio y agosto de ocho a ocho y treinta minutos». Además, en la zona de las calas vírgenes se realizarán 91 horas extras más.

Con todo, Gomila apuntó que «con la empresa también hemos acordado que, si el buen tiempo acompaña, la vigilancia ya se iniciará en abril y podría acabar en noviembre».

El portavoz de PSM-IV-Entesa también preguntó por los problemas en los accesos a las playas vírgenes de Cala Varques y Cala Magraner.

Por su parte, el delegado de Medio Ambiente, Bernat Amer, avanzó que «estamos negociando abrir hasta el mar los caminos de Cala Varques y Cala Magraner».

En relación a Cala Varques, Amer explicó que la propiedad había solicitado la construcción de un aparcamiento y explotar su gestión. Propuesta que rehusó el Consistorio al tratarse de una zona protegida. Ahora se negocia la apertura de un camino de emergencias hasta la playa con la colaboración del regidor Toni Servera. En el caso de Cala Magraner, se estudia modificar el vial de acceso para no perjudicar a terceros.