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El equipo de gobierno del Ajuntament de Calvià que preside el alcalde Manuel Onieva (PP) procederá a realizar una revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio.

Según la teniente de alcalde de Urbanismo, Eugenia Frau, la revisión se iniciará en unas semanas por los propios técnicos municipales para economizar costes.

El equipo de gobierno prevé la presentación del avance del plan al pleno de la corporación para su aprobación dentro de unos meses. El objetivo es que el nuevo PGOU sea aprobado definitivamente en esta legislatura.

Oficina

A tal efecto se creará una Oficina de Planeamiento Urbanístico encabezada por el director de Urbanismo y Planeamiento, Josep Aguiló, que obligará a efectuar una redistribución de funcionarios en varios departamentos municipales.

El Ajuntament recurrirá únicamente a contratar asistencias técnicas o a determinados profesionales externos para la elaboración de estudios que por su complejidad no puedan ser asumidos por los técnicos de la oficina.

Para Frau, con esta revisión del PGOU «pretendemos avanzar en la reconversión y modernización de las zonas maduras del municipio para poner las herramientas para luchar contra la desestacionalización».

Precisamente sobre las modificaciones puntuales que se han aprobado inicialmente durante los últimos meses por el pleno, Frau incide que van en la misma dirección «dotar de equipamientos con la finalidad de potenciar las zonas al mismo tiempo que consolidar la población actual», descartando aumentar la presión urbanística y humana en el litoral.

Expropiaciones

Uno de los principales motivos argumentados por el gobierno es que el Plan actualmente vigente, aprobado en julio de 2000 y modificado en junio de 2009 para adaptarlo al Plan Territorial Insular de Mallorca, se realizó en momentos de crecimiento y prosperidad económica.

Dicho planeamiento, que en principio tiene una vigencia de doce años, contempla expropiaciones de terrenos privados para equipamientos públicos o zonas verdes por valor de 500 millones de euros, cifra «totalmente inasumible por el Ajuntament en la coyuntura económica actual del municipio». En definitiva se pretende «actualizar y arreglar lo que ahora está mal del planeamiento aprobado entonces», añadió Frau.