Vista de parte de la finca de Ses Planes situada en el núcleo turístico de Palmanova.

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El Consistorio de Calvià, con los votos del equipo de gobierno que preside el alcalde Manuel Onieva (PP), ha aprobado iniciar una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) afín de recalificar unos 97.000 metros cuadrados de suelo rústico de la finca Ses Planes para que sean terreno urbanizable.

La propuesta abarca la franja de terrenos en forma de triángulo comprendidos entre la autovía Ma-1 y la carretera C-719 (Palma-Andratx) próximos a las rotondas de acceso a Palmanova y Magaluf. Concretamente desde el PAC y el intercambiador ocupado actualmente por dependencias de la Guardia Civil en Palmanova hasta la rotonda de Cas Saboners o Cala Figuera.

Según el avance de la memoria, la modificación a introducir en el planeamiento vigente prevé «calificar los terrenos lucrativos que resulten de la ordenación del sector como zonas de equipamiento privado (EQ-R)», contemplando que la edificabilidad global sea de un 50% de la superficie del terreno. Los equipamientos privados permiten la construcción de centros comerciales, entre otros usos.

La teniente de alcalde de urbanismo, Eugenia Frau, considera que estos terrenos reúnen las «características optimas medioambientales» para ser urbanizados afín de ampliar la oferta de equipamientos comunitarios que demandan los ciudadanos.

Asimismo, el Consistorio recibirá de parte de los propietarios del terreno parcelas libres de cargas de urbanización correspondientes al 15% de la edificabilidad media ponderada.

El portavoz del grupo Socialista en la oposición, Alfonso Rodríguez Badal, denunció, una vez más, las continuas modificaciones puntuales durante esta legislatura con «una edificabilidad a la carta que están cambiando sustancialmente el planeamiento general del urbanismo en el municipio con lo cual se convierten en una revisión encubierta del PGOU».

«Entre la autopista y la carretera (de Andratx) ya no queda prácticamente nada que no sea urbano desde la rotonda de Cala Figuera y Costa d’en Blanes», añadió Rodríguez refiriéndose a diversas y sucesivas recalificaciones acordadas por el equipo de gobierno (PP) en los últimos meses.

El alcalde, Manuel Onieva reconoció que «suena a reiterado las modificaciones puntuales», pero insistió que en estos momentos de crisis es mejor que los equipamientos sean de índole privada, ya que desde el Ajuntament «no podemos mantener los equipamientos públicos que tenemos» y dejó entrever en sus declaraciones que en un próximo futuro el Consistorio podría acometer una revisión del actual Planeamiento Urbanístico General vigente.